Nokia nombró el martes al veterano de las redes móviles Rajeev Suri como su nuevo presidente ejecutivo y anunció que distribuiría aproximadamente 1.000 millones de euros en un dividendo especial y un programa de recompra de acciones para intentar recuperar el grado de inversión.
Estas decisiones financieras se han tomado tras la venta de la filial de teléfonos móviles de la compañía a Microsoft.
Se esperaba que Suri, un ingeniero de telecomunicaciones y electrónica que ha liderado la red móvil de Nokia desde 2009, fuera el elegido para ocupar el cargo de máxima responsabilidad de la empresa.
Sucederá en el puesto a Risto Siilasmaa, el presidente de Nokia, que ocupaba el cargo de presidente ejecutivo interino desde septiembre, cuando Microsoft dio a conocer sus planes de comprar el negocio de teléfonos móviles de Nokia.
Stephen Elop lideraba Nokia cuando se vendió este negocio, pero dejó la empresa para aceptar un puesto en Microsoft.
Liberada de sus deficitarias operaciones de fabricación de teléfonos, Nokia dijo que su 'posición financiera y su perfil de beneficios han mejorado significativamente' y que, por tanto, distribuiría más capital entre sus accionistas y recompraría acciones en el marco de un 'programa de optimización de la estructura de capital'.
Además de los 800 millones de euros que Nokia distribuirá en forma de dividendos ordinarios con cargo a 2013 y 2014, el grupo planea distribuir un dividendo especial de 0,26 euros por acción, lo que equivale a una distribución de efectivo de unos 1.000 millones de euros. Además, iniciará un programa de recompra de acciones valorado en 1.250 millones de euros.
Nokia cerró el primer trimestre del año con 2.100 millones de euros en efectivo neto, antes de completar la venta de su división de teléfonos móviles a Microsoft. Si esta operación se hubiera completado antes del final del primer trimestre, Nokia dijo que su posición de efectivo habría sido de 7.100 millones de euros.