Por CNN
Lo que el periodista, Jonathan Greenberg, detalló este viernes en el programa de CNN 'New Day" se parece mucho a otras historias acerca de Trump haciéndose pasar por el (falso) ejecutivo de la Organización Trump John Barron y alardeando de sus hazañas con el dinero y las mujeres.
Greenberg sostuvo que Trump, siendo supuestamente Barron, logró que una fortuna de aproximadamente US$5 millones pareciera de US$100 millones para entrar en la lista de Forbes.
Los rankings actuales de la revista ubican a Trump en la posición 248 de las 400 personas más ricas de EE.UU. y en el puesto 766 de su lista de multimillonarios del mundo. Además, fija el valor de su riqueza en US$3.100 millones, una disminución significativa frente a los US$3.700 millones reportados en 2016.
La veracidad detallada de las acusaciones de Greenberg -aunque esté respaldada por una grabación de audio recientemente descubierta- tendrá que ser comprobada. Pero, es particularmente cierto que no sabemos tanto sobre las finanzas del presidente como podría creerse.
CNN contactó a la Casa Blanca para comentar al respecto. El diario The Washington Post reportó que la Casa Blanca se negó a hacer declaraciones y que la Organización Trump no respondió a las solicitudes del periódico. Justo esta semana, mientras el Servicio de Impuestos Internos de EE.UU. (IRS, por sus siglas en inglés) se vio forzado a dar un día más de plazo para que los estadounidenses presentaran su declaración de renta debido a fallas en el sitio web, Trump solicitó una extensión de seis meses -totalmente legal- para entregar los documentos de sus impuestos.
No es que eso realmente importe desde el punto de vista de la transparencia, pues a pesar de que este multimillonario presidente tiene la probabilidad más grande de enfrentar conflictos de interés, él ha roto -y sigue haciéndolo- la antigua tradición de permitir que los estadounidenses vean su declaración de renta.
Pero eso no quiere decir que no sepamos nada.
Está obligado, como candidato y ahora como mandatario, a divulgar mucha información sobre la increíble red de empresas, bienes inmuebles y campos de golf que contribuyen a su riqueza.
Esta semana, CNN publicó una revisión exhaustiva de esa información en el amplio y contenido interactivo What we do actually know about Trump's business empire (Lo que realmente sabemos sobre el imperio comercial de Trump).
Y hay un montón de información para analizar cuidadosamente:
En sus declaraciones de renta más recientes, Trump ganó por lo menos:
Es fascinante sumergirse en las ubicaciones: Kolkata, Mumbai, Punta del Este. Incluso, los últimos documentos que presentó son previos a la subida de los precios de su club Mar-a-Lago.
Todo esa riqueza es controlada por sus hijos y un fideicomiso mientras es presidente.
No sería apropiado que John Barron entrara a tomar el mando.
Lo que el periodista, Jonathan Greenberg, detalló este viernes en el programa de CNN 'New Day" se parece mucho a otras historias acerca de Trump haciéndose pasar por el (falso) ejecutivo de la Organización Trump John Barron y alardeando de sus hazañas con el dinero y las mujeres.
Greenberg sostuvo que Trump, siendo supuestamente Barron, logró que una fortuna de aproximadamente US$5 millones pareciera de US$100 millones para entrar en la lista de Forbes.
Los rankings actuales de la revista ubican a Trump en la posición 248 de las 400 personas más ricas de EE.UU. y en el puesto 766 de su lista de multimillonarios del mundo. Además, fija el valor de su riqueza en US$3.100 millones, una disminución significativa frente a los US$3.700 millones reportados en 2016.
La veracidad detallada de las acusaciones de Greenberg -aunque esté respaldada por una grabación de audio recientemente descubierta- tendrá que ser comprobada. Pero, es particularmente cierto que no sabemos tanto sobre las finanzas del presidente como podría creerse.
CNN contactó a la Casa Blanca para comentar al respecto. El diario The Washington Post reportó que la Casa Blanca se negó a hacer declaraciones y que la Organización Trump no respondió a las solicitudes del periódico. Justo esta semana, mientras el Servicio de Impuestos Internos de EE.UU. (IRS, por sus siglas en inglés) se vio forzado a dar un día más de plazo para que los estadounidenses presentaran su declaración de renta debido a fallas en el sitio web, Trump solicitó una extensión de seis meses -totalmente legal- para entregar los documentos de sus impuestos.
No es que eso realmente importe desde el punto de vista de la transparencia, pues a pesar de que este multimillonario presidente tiene la probabilidad más grande de enfrentar conflictos de interés, él ha roto -y sigue haciéndolo- la antigua tradición de permitir que los estadounidenses vean su declaración de renta.
Pero eso no quiere decir que no sepamos nada.
Está obligado, como candidato y ahora como mandatario, a divulgar mucha información sobre la increíble red de empresas, bienes inmuebles y campos de golf que contribuyen a su riqueza.
Esta semana, CNN publicó una revisión exhaustiva de esa información en el amplio y contenido interactivo What we do actually know about Trump's business empire (Lo que realmente sabemos sobre el imperio comercial de Trump).
Y hay un montón de información para analizar cuidadosamente:
En sus declaraciones de renta más recientes, Trump ganó por lo menos:
- US$307,7 millones por sus propiedades de golf
- US$139,8 millones por sus bienes inmuebles
- US$105,4 millones por sus hoteles
- US$14 millones en el negocio del espectáculo
- US$8,8 millones por sus aviones.
Es fascinante sumergirse en las ubicaciones: Kolkata, Mumbai, Punta del Este. Incluso, los últimos documentos que presentó son previos a la subida de los precios de su club Mar-a-Lago.
Todo esa riqueza es controlada por sus hijos y un fideicomiso mientras es presidente.
No sería apropiado que John Barron entrara a tomar el mando.