Para Enrique Bolaños, rector del Instituto Centroamericano de Administración de Empresas (INCAE). "Necesitamos que los gobiernos funcionen para innovar; la coyuntura que atraviesa el mundo exige acciones que ayuden a los empresarios a encontrar el camino de la recuperación".
"Alcanzar la total unión aduanera, impulsar inversiones comerciales comunes, eliminar las barreras no arancelarias y simplificar el paso por las fronteras son apenas los siguientes primeros pasos para crear una verdadera Comunidad Económica Centroamericana", agrega Bolaños, y advierte: "no hemos avanzado en competitividad en los últimos 15 años. Tampoco en productividad, ni en educación".
Detalla el poder del bloque centroamericano "Representamos un bloque económico de más US$400 millardos y 45 millones de ciudadanos. Esto nos ubicaría en las primeras cincuenta economías del mundo. Integrados somos un socio comercial más atractivo para cualquier país del mundo. Nuestro comercio intrarregional representa el 27 % de nuestras exportaciones y el 13 % de nuestras importaciones del bloque. El segundo socio comercial de la región después de Estados Unidos, es la misma Centroamérica". Tenemos que pensar distinto, sostiene, sobre todo porque "el nivel de pobreza de los países del CA4 es tan alto, y vienen los retos de la cuarta revolución y los del cambio climático".
Si en febrero -cuando el rector de INCAE concedió a E&N una primera entrevista- la región estaba en un buen momento para integrarse y reducir las brechas, hoy, advierte, "la integración no puede quedar fuera de la agenda post-Covid-19.
A decir de Bolaños "Tenemos la oportunidad de posicionarnos como un "hub productivo" para las cadenas de valor global. Antes de la pandemia, la tensión comercial entre Estados Unidos y China había estimulado a las compañías a repensar la configuración geográfica de sus cadenas de valor. Las interrupciones en éstas, generadas por la pandemia dan mayor peso a la "resiliencia".
"Con nuestro acceso preferencial a los principales mercados del mundo (Estados Unidos y Europa) y nuestra fuerza laboral mayormente joven podremos aprovechar estas nuevas oportunidades comerciales, si logramos una mayor sofisticación de las actividades productivas desde el sector privado y un mejor clima de negocio apoyado por el sector público".
¿Por qué es hoy un mejor momento para que ese sueño de la integración se cumpla? "Es un tema de agenda que debemos retomar entendiendo que la meta no es solo integrarnos, sino crecer al 6%. La meta es, primero, la integración económica; lograr algo muy tangible, aprender a caminar juntos y alcanzar una agenda a 20 años plazo. Pensemos no solo en Centroamérica, sino en la Alianza del Pacífico y México", concluye el académico.
