Por E&N Brand Lab para Progreso
La visión de Progreso se sostiene en una convicción: construir juntos el país donde todos queremos vivir. Esta no es solo una frase para la compañía; es un faro que guía cada decisión estratégica. Hoy, más que nunca, la visión de Progreso es regional, pero con un accionar profundamente local: entiende que cada país donde opera tiene sus necesidades, su cultura y su gente. “Y a cada uno llegamos con respeto, con la voluntad de aprender y con el compromiso de sumar valor”, dice su CEO, José Raúl González.
Con operaciones productivas en seis países y comerciales en dos más, Progreso ha evolucionado de ser una cementera tradicional a convertirse en una compañía multinegocio con soluciones en agro, energía, innovación y desarrollo inmobiliario. Esta diversificación ha fortalecido su resiliencia frente a disrupciones globales y ha abierto nuevas fuentes de ingreso, sin perder su enfoque social. “Hace apenas unos años, nuestra operación era principalmente guatemalteca. Hoy, estamos presentes en ocho países con plantas productivas y operaciones comerciales”, refirió el directivo.
MODELO DE NEGOCIO INNOVADOR
Progreso es fruto de la innovación de un gran emprendedor y visionario que inició con un producto que no existía en Guatemala. Carlos F. Novella implementó innovación tanto en lo comercial, como en lo ambiental y lo social, al ser pionero en dar a sus trabajadores salud y educación. Por esta razón, para Progreso la innovación no es un destino sino el camino.
En este sentido, la innovación es una de las competencias que la compañía fomenta en sus colaboradores, por lo que cuenta con áreas de innovación y desarrollo para evaluar cuáles son las últimas tendencias en el mercado y conocer opciones a implementar de manera interna. En 2019, por ejemplo, dio vida a Progreso X, su aceleradora corporativa, que lidera las iniciativas de innovación que se identifican y codesarrollan entre Progreso y startups.
“El área científica es liderada por el Centro de Investigación y Desarrollo (CID), el cual investiga, asesora, experimenta, capacita y atiende los requerimientos de sus unidades internas y de los grupos de interés. También, desarrolla nuevos productos, mejora los existentes y ejecuta proyectos estratégicos”, destacó González.
Y es que más allá del crecimiento geográfico, Progreso ha transformado su modelo de negocio incorporando tecnologías disruptivas como impresión 3D, IA, digitalización o perativa y energías renovables.
En este campo, destaca el desarrollo de Clara, su embajadora digital de sostenibilidad creada con IA. Además, Progreso está liderando el camino para la impresión 3D de concreto en América Latina con la instalación de la primera impresora 3D de construcción COBOD International en la región.
En este aspecto, la compañía destaca por su primera edificación 3D más grande de Latinoamérica, un laboratorio impreso con concreto en la planta de San Miguel, en Sanarate, de 508 metros cuadrados, que será el nuevo hogar del laboratorio y oficinas de Predosificados Mixto Listo. El desarrollo fue ejecutado en tan solo 154 horas efectivas de impresión distribuidos en 32 días, utilizando la tecnología de impresión 3D para construcción BOD2 de COBOD. Se empleó una mezcla especial de Dry Mix Mortar, formulada por el CID de Progreso, lo que garantiza una alta eficiencia estructural y precisión técnica.
De igual manera, en la estrategia de innovación de Progreso destacan iniciativas como “Granito de Oro”, el programa de reconocimiento interno más importante para la organización, el cual permite que cada año los colaboradores den a conocer sus iniciativas innovadoras que contribuyen a los imperativos estratégicos.
La edición 2025 de “Granito de Oro” incluyó la participación de 32 equipos que compitieron en distintas categorías para destacar los proyectos más sobresalientes de la compañía. “En Progreso nuestro crecimiento se logra sumando bloques: valor, desarrollo, crecimiento, fortaleza y mejora. Cada colaborador es un constructor maestro, capaz de transformar la realidad con innovación y propósito”, aseguró el CEO.
GESTIÓN TRANSPARENTE
Para Progreso ha sido clave planificar a largo plazo para alcanzar y mantener la posición con la que cuenta en la actualidad. “No pensamos en trimestres; pensamos en generaciones. Esta visión nos permite invertir sin comprometer nuestra esencia. Por ejemplo, en cada nuevo país en el que incursionamos buscamos integrarnos con humildad, respetando las dinámicas locales y fortaleciendo nuestras raíces culturales”, asegura González.
En esta visión estratégica también ha resultado fundamental el sólido marco de gobernanza familiar y empresarial que la compañía implementa, que se traduce en una Junta Directiva profesional, plural y estratégica.
Además, Progreso cuenta con certificaciones que garantizan procesos auditables en calidad, seguridad, ética y medio ambiente, entre ellas: las normas ISO (9001, 14001,45001, 37001, 50001), así como estándares europeos y GRI para sus reportes de sostenibilidad.
De igual manera, todas las acciones de Progreso se rigen por su Código de Valores, Ética y Conducta (COVEC), que es mucho más que un documento; es la brújula que guía sus decisiones.
HITOS DE PROGRESO EN 2025
5.955 empleos directos.
13.697 empleos indirectos.
6 países con operaciones productivas y dos con operaciones comerciales.
6,5 millones de toneladas de cemento de capacidad instalada.
488% de crecimiento en formación de colaboradores.
27% de mujeres en puestos de decisión.
EN EXPANSIÓN
Con una capacidad instalada de 6,5 millones de toneladas de cemento, Progreso genera 5.955 empleos directos y 13.697 indirectos en Guatemala y en los países en donde ha logrado expandir sus operaciones, como Belice, Honduras, Panamá, Costa Rica, El Salvador, Colombia y recientemente, República Dominicana, donde incursionó entre 2024 y 2025, al ser un mercado estratégico con características similares al guatemalteco.
ESCUCHA CONSTANTE
José Raúl González destaca que la compañía trabaja orientada a partir de una escucha constante para mantener altos niveles de satisfacción. “Escuchamos. Medimos. Aprendemos. En 2024, obtuvimos un Net Promoter Score del 96,7 % y un Índice de Satisfacción del 92,1 %. Esta escucha activa nos permite adelantarnos a las necesidades del cliente, desarrollando productos como mezclas predosificadas adaptadas a cada mercado y ofreciendo una experiencia de compra personalizada. No vendemos cemento; construimos confianza”, reitera,
"EN PROGRESO NO PENSAMOS EN TRIMESTRES; PENSAMOS EN GENERACIONES. ESTA VISIÓN NOS PERMITE INVERTIR SIN COMPROMETER NUESTRA ESENCIA. POR EJEMPLO, EN CADA NUEVO PAÍS BUSCAMOS INTEGRARNOS CON HUMILDAD, RESPETANDO LAS DINÁMICAS LOCALES Y FORTALECIENDO NUESTRAS RAÍCES CULTURALES”.
José Raúl González, CEO de Progreso
