El Salvador y Cuba cerraron este miércoles en San Salvador la negociación de un Acuerdo de Alcance Parcial (AAP) que concederá beneficios arancelarios a ciertos productos de interés para ambas naciones, informaron fuentes oficiales.
'Estamos anunciando el cierre de la negociación de un Acuerdo de Alcance Parcial entre El Salvador y Cuba, que busca incrementar el flujo de comercio recíproco', señaló en una rueda de prensa el ministro salvadoreño de Economía, Héctor Dada.
El cierre del AAP, logrado luego de tres rondas de negociaciones, beneficiará con 'descuentos' arancelarios a 1.100 líneas de productos de ambos países, explicó Dada.
De los productos beneficiados, el 60% tendrá 'una rebaja de arancel a cero y el resto tendrán una rebaja de entre el 50% y 35% en el arancel que actualmente pagan', explicó el director de Política Comercial del ministerio salvadoreño de Economía, Carlos Moreno.
Actualmente, El Salvador exporta a Cuba medicinas, jeringas hipodérmicas, sueros, papeles, cartones, agujas de sutura y colchones, entre otros productos.
En tanto, Cuba le vende vitaminas, reactivos de laboratorio, cigarros y puros, tejidos de yute, antibióticos, entre otros.
Cifras del Banco Central salvadoreño indican que en 2010 la balanza comercial bilateral fue favorable a la nación centroamericana, que exportó a la isla comunista tres millones de dólares e importó 128.000 dólares.
'Creemos que con este acuerdo, el primero de tipo comercial que alcanzamos con El Salvador, estamos dando seguridad jurídica a los empresarios salvadoreños y cubanos que hacen negocios, es una oportunidad para crear fuentes de empleo, comerciar más', dijo el embajador de Cuba en El Salvador, Pedro Pablo Prada.
Dada explicó que la próxima semana, funcionarios de ambos países firmarán en San Salvador los documentos del AAP, aunque no precisó cuándo entrará en vigor.
Este es el primer acuerdo que en materia arancelaria logran ambos países desde que restablecieron relaciones diplomáticas en junio de 2009, tras casi medio siglo de interrupción en el marco de la Guerra Fría.
El presidente Mauricio Funes restableció los lazos con La Habana en uno de sus primeros actos como primer gobernante izquierdista de El Salvador.
