Por Roberto Kriete, fundador del Instituto Key y presidente de la Junta Directiva de Avianca
En el mundo actual, acelerado y en constante evolución, la importancia de la formación en habilidades se ha hecho más evidente que nunca. La noción tradicional de depender únicamente de las competencias académicas ya no es suficiente para garantizar un futuro exitoso.
Hace más de 19 años junto a mis hermanos creamos Fundación Gloria Kriete, uno de nuestros principales pilares de gestión ha sido la educación, nuestros programas educativos cuentan hoy en día con una malla curricular fortalecida con pensamiento STEAM y diferentes habilidades para las profesiones del presente y, sobre todo, del futuro, que permiten a los jóvenes desenvolverse con seguridad en cualquier entorno profesional, emprender y desempeñar roles que todavía ni existen. Hasta la fecha, por medio de la fundación hemos impactado a más de 4,000 jóvenes salvadoreños quienes ahora contribuyen activamente al desarrollo productivo de El Salvador.
Desde el 2022 he venido trabajando junto a un gran equipo de profesionales nacionales y extranjeros en la creación de un nuevo concepto de formación profesional enfocado en las ingenierías, su nombre Instituto Key, un proyecto que no forma parte de la Fundación pero que, sí comparten la idea de que integrar las “habilidades técnicas” con las “Power Skills” (habilidades que dan a las personas poder en el trabajo: poder para colaborar, poder para comunicarse de manera efectiva y poder para liderar) es el camino para la transformación de la educación.
Las habilidades del futuro ya no se limitan a las técnicas; también deben incluir competencias conductuales. Por ello, a través de Key, buscamos facilitar el acceso a los aprendizajes esenciales del siglo XXI para jóvenes con gran potencial en toda la región.
Para la realización de este proyecto, hemos integrado diversas perspectivas sobre la educación en la región, con el objetivo de crear un espacio dedicado a la excelencia en el aprendizaje. Hemos establecido alianzas estratégicas con expertos en educación especializada, como el Instituto Tecnológico de Monterrey, que ofrece 18 programas en ingeniería y ciencias, enfocados en formar profesionales con una visión futurista y preparados para enfrentar los desafíos de la sociedad actual.
Organismos internacionales reconocen que las ingenierías, en sus distintas especialidades, serán de las profesiones con mayor demanda en el futuro cercano, lo que reafirma que estamos en la dirección correcta.
El Salvador es un país de grandes referentes empresariales que, con visión y audacia, han logrado posicionarse entre los gigantes de América Latina. Mi objetivo es llevar esa misma visión al ámbito educativo, para que el Instituto Key impulse a la educación de nuestro país hacia estándares globales, convirtiéndonos en un referente de excelencia. Juntos, estamos co-creando el futuro de la educación, reimaginando nuevas posibilidades y, sobre todo, construyendo un legado trascendental que inspire a generaciones futuras, moldeando mentes que no solo transformarán nuestro país, sino que dejarán una huella en el mundo.