Por: El Financiero
El proceso de reestructuración interna que inició Intel a nivel global desde el año pasado sigue impactando la sede de Costa Rica.
La empresa comunicó ayer a 40 de sus empleados en el país que sus plazas serían eliminadas debido a procesos que buscan una mejor atención a los clientes de la corporación. Los puestos pertenecen al Centro de Servicios Globales que la compañía maneja desde aquí.
De acuerdo con Karla Blanco, directora de Relaciones Corporativas de la firma, la medida implica la sustitución de esas 40 plazas por 50 en posiciones de mayor sofisticación como desarrollo de software y bases de datos, áreas en las que la empresa se intenta enfocar para responder a los cambios de los mercados que atiende.