Edén Atanacio Pastora Gómez, de 77 años, es el responsable de las obras del dragado del fronterizo río San Juan, detonante de una de las crisis más prolongadas en las conflictivas relaciones entre Costa Rica y Nicaragua, cuyo caso está en manos de la Corte Internacional de Justicia (CIJ).
Por: AFP
El exguerrillero nicaragüense Edén Pastora, emblemático luchador contra la dictadura de Anastasio Somoza que luego se convirtió en enemigo de sus camaradas revolucionarios, es el centro de un conflicto limítrofe entre Nicaragua y Costa Rica.
Edén Atanacio Pastora Gómez, de 77 años, es el responsable de las obras del dragado del fronterizo río San Juan, detonante de una de las crisis más prolongadas en las relaciones conflictivas de ambos países, cuyo caso está en manos de la Corte Internacional de Justicia (CIJ).
Costa Rica denunció en octubre del 2010 que Nicaragua lanzó sedimentos a su territorio y que tropas nicaragüenses invadieron una pequeña isla fluvial cuya soberanía está en disputa.
El diferendo entre ambos países llegó a un nuevo capítulo este martes cuando la Organización Internacional de la Policía Criminal (Interpol) incluyó a Pastora en la lista de los más buscados tras una petición del gobierno de Costa Rica.
'Que me capturen en cualquier lugar del universo. Son locuritas', dijo Pastora desde un hospital militar, donde está internado para chequeos médicos de rutina.
Pastora indicó que él es sólo un funcionario de gobierno, que esto es un diferendo entre países y no debería ser entre personas individuales. 'Lo hacen en forma necia, tonta, por tratar de recuperar prestigio (...). Son necedades, tonteras, estupideces', reaccionó.
Pastora saltó a la fama el 22 de agosto de 1978 con el asalto al Palacio Nacional, donde tomó como rehenes a diputados del régimen de Somoza.
Con esta acción el guerrillero puso en la agenda internacional la lucha armada que se libraba al interior de Nicaragua, que 11 meses más tarde culminó con el derrocamiento de la dictadura.
El asalto al Palacio Nacional permitió la liberación de varios prisioneros del Frente Sandinista de Liberación Nacional (FSLN), entre ellos, Tomás Borge, quien más tarde llegó a ser ministro del Interior.
Con el triunfo de la Revolución en 1979, Pastora fue nombrado viceministro del Interior (Gobernación). En las funciones de su cargo formó las Milicias Populares Sandinistas (MPS) con el fin de defender el proceso revolucionario.
En 1981, renunció al gobierno sandinista por discrepancias con los dirigentes del FSLN y se alzó en armas para combatir al régimen. En ese entonces, formó una guerrilla denominada Alianza Revolucionaria Democrática (ARDE).
Durante esta etapa, tuvo su base de operaciones en el norte de Costa Rica, próximo al río San Juan, cuya margen es frontera natural con el vecino país.
El llamado 'comandante Cero' recibió apoyo en Costa Rica para sus actividades insurgentes y, tras finalizado el conflicto armado de la década de 1990, permaneció en ese país donde optó por la ciudadanía costarricense.
A su regreso a Nicaragua se integró a la política e intentó ser candidato presidencial en 1996.
Debido a que había adoptado la nacionalidad costarricense, el tribunal electoral nicaragüense lo inhibió de participar como candidato, a lo que Pastora reaccionó declarándose en huelga de hambre.
En ese momento, dijo que renunciaba a la nacionalidad costarricense y volvía a ser nicaragüense.
En el 2008 se reconcilió con el presidente Daniel Ortega, quien le nombró delegado de su gobierno para el desarrollo del río San Juan.