La embajadora de los Estados Unidos en Nicaragua, Phyllis M. Powers, entregó una donación valorada en US$5,7 millones a la Fuerza Naval de Nicaragua. La ceremonia de entrega se realizó en la Base Naval de El Bluff, en el municipio de Bluefields.
Por: Agencias
La donación forma parte de los esfuerzos que realiza Estados Unidos en la lucha contra la delincuencia organizada transnacional (CTOC por sus siglas en inglés) y apoya la estrategia 'Muro de Contención' del Gobierno de Nicaragua. ésta incluye la construcción de un centro de operaciones, una bodega de almacenamiento y una rampa para botes con una carretera de conexión a la base naval de El Bluff, así como dos lanchas de intercepción marítima con sus respectivos repuestos, cuya operación y mantenimiento estará a cargo de miembros de la Fuerza Naval entrenados en Estados Unidos.
La construcción del centro de operaciones tuvo un costo de US$1,4 millones de dólares y requirió la demolición del edificio existente y el diseño de una nueva base sísmica. Las nuevas instalaciones incluyen una cocina, comedores, un tanque de almacenamiento de agua de 10.000 litros, letrinas, un nuevo sistema de drenaje compuesto por un tanque séptico de concreto y un amistoso campo de drenaje séptico ambiental. La rampa de botes construida en hormigón tiene un largo de 24 metros por 5 metros de anchura.
Estas construcciones se realizaron con un alto porcentaje de mano de obra local, ofreciendo trabajo a más de 25 nicaragüenses que trabajaron bajo la supervisión del experimentado Cuerpo de Ingenieros del Ejército de Estados Unidos.
Las dos lanchas de intercepción marítima, marca Boston Whaler, modelo 370 Justice, y sus respectivos camiones de arrastre Ford 450XLT, están valoradas en US$1,2 millones. Las lanchas rápidas de 37 pies de longitud, están construidas con un casco insumergible y consola central que contiene equipos sofisticados de comunicación, cartas y mapas náuticos. Las lanchas cuentan con tres motores Mercury Verado y tienen un alcance suficiente para patrullar en alta mar e interceptar las lanchas rápidas usualmente utilizadas por los narcotraficantes de drogas y armas.
En mayo de 2013, cinco marineros nicaragüenses fueron entrenados en el estado de La Florida, Estados Unidos, para el mantenimiento y la operación de las lanchas y sus motores.
Para mejorar las capacidades en la lucha contra el narcotráfico, también se donaron ocho binoculares térmicos con un valor de US$257.000 dólares. Estos aparatos tienen la habilidad de ver entornos, objetos, lanchas y personas en condiciones de baja iluminación para captar la radiación infrarroja u otras longitudes de onda emitida por estos cuerpos.
La Fuerza Naval de Nicaragua ha sido exitosa en la incautación de droga, a pesar de las limitaciones de recursos. Con estos equipos se mejorará la calidad de sus equipos para enfrentar diversas amenazas. El Jefe de la Sección Naval del Grupo Militar de la Embajada de Estados Unidos, Capitán de Corbeta Roberto Colón-Cruz, resaltó la importancia de incorporar esas nuevas lanchas y equipos a la flota naval nicaragüense para continuar salvaguardando las aguas del Caribe y enfrentar las amenazas a la seguridad de la región.