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Treinta y tres días después de la desaparición de 43 estudiantes mexicanos, el presidente Enrique Peña Nieto escuchó el miércoles por primera vez a sus desesperados padres en un largo encuentro del que los familiares salieron decepcionados. Peña Nieto explicó que este encuentro a puerta cerrada con familiares, abogados y compañeros de los desaparecidos fue un espacio para 'generar confianza'. 'Salimos con la misma noticia de que está en la búsqueda, pero no tenemos nada', dijo en una rueda de prensa Felipe de la Cruz Sandoval, padre de uno de los desaparecidos. 'La confianza no se pide, se gana', recalcó David Flores, representante del Comité Estudiantil. Mientras este acercamiento se intento en Los Pinos (sede federal del gobierno), en Guerrero, una de las regiones más pobres y violentas de México, los estudiantes y maestros protagonizan fuertes protestas, que incluyeron el incendio de la sede del gobierno del Estado y la alcaldía de Iguala.
(Fuente: AFP)