Nestlé apoyará a 300 caficultores salvadoreños con medio millón de plantas resistentes a la roya, como parte de su segunda etapa de la estrategia de su marca NESCAFé Listo de Creación de Valor Compartido, que el año pasado benefició a 150 agricultores con 250.000 plantas de café en la zona del Trifinio, que El Salvador también comparte, al noroeste, frontera en esa área con Guatemala y Honduras.
Así lo confirmó el country manager de Nestlé El Salvador, Luis Alberto Paiz, quien confirmó que tras el proceso y éxito alcanzado tras un año en el Trifinio es que decidieron continuar con las áreas de Ilamatepec y el Bálsamo; mientras cada zona intervenida por este plan para el cambio del parque cafetero afectado por la roya recibe una asistencia integral por tres años.
"Entregamos las plantas de café, pero además brindamos la asistencia técnica y seguimiento a las zonas", dijo Paiz, quien aclaró que el plan busca apoyar a pequeños productores de menos de cinco hectáreas.
La compañía dio a conocer el plan en 2010 en la Ciudad de México, como parte de una inversión global de 500 millones de francos suizos en proyectos de café hasta 2020.
Esta estrategia incluye una serie de objetivos globales que aparte de apoyar a pequeños productores, también pretende ayudar a Nestlé, al optimizar su cadena de suministro, incluyendo un incremento en compras directas, además de programas de asistencia técnica a los productores de café.
Sin embargo, Paiz enfatizó que los caficultores beneficiados en las zonas intervenidas no están obligados a vender su producto a NESCAFé Listo, sino "que son completamente libres de vender a quien mejor les parezca; nuestro interés es contribuir recuperar el parque cafetero afectado y que los pequeños productores salgan adelante, dentro de nuestra estrategia de Valor Compartido".
El Plan NESCAFé se lanzó desde 2013 en Centroamérica, en Nicaragua, Honduras y Guatemala, mientras que en 2015 llegó a El Salvador con NESCAFé Listo, en conjunto con la Fundación Hanns R. Neumann Stiftung, para el área del Trifinio y para esta segunda etapa se ha contado con el apoyo de la Fundación Unex.
En ambos casos se ha elegido plantas de café arábigo de la variedad sarchimor (injertado en Nemaya, para la segunda entrega de medio millón de plantas), una clase de grano que demuestra tener buenos rendimientos y buena taza en las condiciones climáticas que tiene hoy El Salvador.
"Si bien hemos elegido una variedad de café resistente a la roya, no hemos sacrificado calidad en la taza de café", aseguró Paiz.
Pero Paiz recordó que este tipo de iniciativas debe contar con el trabajo conjunto de empresa privada, sociedad civil y Gobierno.
"Invitamos siempre a los eventos simbólicos de entrega de plantas a las autoridades estatales y les comunicamos de lo que estamos haciendo en cada país", agregó.