POR EFE
El Ministerio chino de Exteriores anunció este lunes que el país sancionará a miembros del Congreso de Estados Unidos, funcionarios y responsables de organizaciones no gubernamentales por sus interferencias en los asuntos de Hong Kong.
La medida responde a las sanciones impuestas por Washington el pasado 1 de abril sobre seis funcionarios del Ejecutivo chino y altos funcionarios de Hong Kong a los que acusa de reprimir los derechos de ciudadanos de la excolonia británica, incluyendo lo que define como "represión transnacional" contra personas que residen en Estados Unidos.
"Cualquier acción arbitraria del lado estadounidense sobre asuntos relacionados con Hong Kong será respondida de forma resuelta con contramedidas recíprocas por parte de China", avanzó hoy en una rueda de prensa el portavoz de Exteriores Guo Jiakun.
Además, Guo calificó las sanciones estadounidenses previas como "una grave violación de los principios del derecho internacional y de las normas básicas de las relaciones internacionales".
El vocero no ofreció detalles sobre las personas sancionadas ni sobre la fecha de entrada en vigor de la medida, anunciada en medio de la reactivada guerra comercial entre China y EEUU.
El Gobierno chino ya había advertido de que tomaría represalias contra Washington por esta ronda de sanciones, que calificó como una "flagrante injerencia en los asuntos internos de China".
La decisión de Washington afectó, entre otros, al máximo responsable de la Oficina para la Salvaguarda de la Seguridad Nacional, Dong Jinwei, figura de peso en Pekín que fue viceministro de Seguridad Estatal, cartera que supervisa el aparato de inteligencia chino.
También al secretario de Justicia de Hong Kong, Paul Lam, y a otros tres altos cargos de Hong Kong y el secretario general del Comité para la Salvaguarda de la Seguridad Nacional en la región autónoma especial.
Según las autoridades del país norteamericano, Hong Kong ha tratado de aplicar contra personas que residen en Estados Unidos la ley de Seguridad Nacional, que fue impuesta por Pekín en respuesta a las fuertes manifestaciones prodemocráticas que sacudieron la excolonia en 2019.
De acuerdo a las mismas, Pekín y los funcionarios hongkoneses utilizaron esta normativa para "intimidar, silenciar y acosar" a 19 activistas prodemocráticos que se vieron obligados a huir al extranjero, incluyendo a un ciudadano estadounidense y cuatro residentes en el país.
Hong Kong busca a al menos 19 antiguos abogados y activistas que residen en países como Canadá, Australia, Reino Unido y Estados Unidos, a los que la Policía investiga por casos de "confabulación con fuerzas extranjeras" o de "incitación a la secesión y a la subversión" al amparo de la citada ley.