Por El Diario de Hoy
Como una deuda pendiente catalogó, la mañana de este lunes el director de la Policía Nacional Civil, Howard Cotto , la recuperación de zonas controladas por grupos delincuenciales (pandillas).
"En eso no vamos a tener una discusión", dijo Cotto al presentador de una entrevista matutina. El control territorial hace referencia a la influencia que puedan tener las autoridades y el gobierno en determinadas zona del país, pero que lo han perdido por la presencia de las pandillas tomando el control.
Ese control en muchas zonas del país se ha perdido, los homicidios continúan, en la mayoría de los territorios tomados por las pandillas las personas que ingresan deben seguir un protocolo de seguridad, apagar las luces del auto y conducir a baja velocidad, existen horas determinadas para ingresar y salir, por ejemplo.
Altavista es el territorio y núcleo poblacional más grande bajo control de la Pandilla 18 Sureña a nivel nacional, cuyo cabecilla principal es Carlos Ernesto Mojica Lechuga, alias Viejo Lin. Lo aseguran fuentes policiales asignadas a ese complejo habitacional que abarca territorio de tres municipios del norte de San Salvador: Ilopango, Tonacatepeque y San Martín.
La residencial Altavista también es el complejo habitacional más grande de El Salvador.
De acuerdo con fuentes policiales, entre los 134 mil habitantes, hay aproximadamente cinco mil personas que son parte o afines a la pandilla 18 sureños.
Ante la problemática, el jefe policial sostiene que el control territorial debe ser la ausencia de delincuentes y la presencia de la Policía, "los habitantes deben jugar un papel fundamental en esta recuperación", agrega.
A juicio del funcionario es fundamental el empoderamiento de las comunidades para ser gestores de su propia seguridad en alianza con la corporación policial. Para Cotto la población debe darle sostenibilidad a la recuperación para no permitir que nuevos grupos criminales se formen. "Si queremos romper con ese esquema qué parte le corresponde a cada quién, quién se encarga de darle sostenibilidad a ese control territorial en algunas zonas", manifestó.
Al respecto ejemplifico que si en una zona donde residen 1OO pandilleros y en un operativo se capturan a todos "la gran pregunta ¿quién le da sostenibilidad para que con el tiempo no vuelva a caer en manos de las pandillas? la población, asegura.
Por otra parte informó en lo que va del año llevan un promedio de 10.500 ordenes administrativas ejecutadas, un incremento del 70% con respecto al año pasado, en el que fueron 6.000.
Como una deuda pendiente catalogó, la mañana de este lunes el director de la Policía Nacional Civil, Howard Cotto , la recuperación de zonas controladas por grupos delincuenciales (pandillas).
"En eso no vamos a tener una discusión", dijo Cotto al presentador de una entrevista matutina. El control territorial hace referencia a la influencia que puedan tener las autoridades y el gobierno en determinadas zona del país, pero que lo han perdido por la presencia de las pandillas tomando el control.
Ese control en muchas zonas del país se ha perdido, los homicidios continúan, en la mayoría de los territorios tomados por las pandillas las personas que ingresan deben seguir un protocolo de seguridad, apagar las luces del auto y conducir a baja velocidad, existen horas determinadas para ingresar y salir, por ejemplo.
Altavista es el territorio y núcleo poblacional más grande bajo control de la Pandilla 18 Sureña a nivel nacional, cuyo cabecilla principal es Carlos Ernesto Mojica Lechuga, alias Viejo Lin. Lo aseguran fuentes policiales asignadas a ese complejo habitacional que abarca territorio de tres municipios del norte de San Salvador: Ilopango, Tonacatepeque y San Martín.
La residencial Altavista también es el complejo habitacional más grande de El Salvador.
De acuerdo con fuentes policiales, entre los 134 mil habitantes, hay aproximadamente cinco mil personas que son parte o afines a la pandilla 18 sureños.
Ante la problemática, el jefe policial sostiene que el control territorial debe ser la ausencia de delincuentes y la presencia de la Policía, "los habitantes deben jugar un papel fundamental en esta recuperación", agrega.
A juicio del funcionario es fundamental el empoderamiento de las comunidades para ser gestores de su propia seguridad en alianza con la corporación policial. Para Cotto la población debe darle sostenibilidad a la recuperación para no permitir que nuevos grupos criminales se formen. "Si queremos romper con ese esquema qué parte le corresponde a cada quién, quién se encarga de darle sostenibilidad a ese control territorial en algunas zonas", manifestó.
Al respecto ejemplifico que si en una zona donde residen 1OO pandilleros y en un operativo se capturan a todos "la gran pregunta ¿quién le da sostenibilidad para que con el tiempo no vuelva a caer en manos de las pandillas? la población, asegura.
Por otra parte informó en lo que va del año llevan un promedio de 10.500 ordenes administrativas ejecutadas, un incremento del 70% con respecto al año pasado, en el que fueron 6.000.