Por Leonel Ibarra - revistaeyn.com
El crecimiento del tráfico en los aeropuertos de América Latina se desacelerará a aproximadamente tres veces la tasa de crecimiento del Producto Interno Bruto de la región después de la recuperación desde el apogeo de la pandemia, proyecta un reporte de S&P Market Inteligence.
Sin embargo, el mayor tráfico aéreo en países como Brasil y México, la clase media en expansión de la región y el aumento de rutas de aerolíneas de bajo costo, que permitirán que más personas puedan viajar en avión, mantendrán alta la demanda.
"Nuestra proyección también considera una fuerte demanda de Estados Unidos, especialmente del turismo; la estabilización gradual de las economías de México y el Caribe; y que la mayoría de los aeropuertos en la región continúen expandiéndose por encima de los niveles previos a la pandemia", indica el reporte.
RECUPERACIÓN
El tráfico aéreo se ha recuperado desde la primera parte de la pandemia, especialmente para los destinos relacionados con el turismo, a medida que los aeropuertos desarrollaron nueva infraestructura y los viajes nacionales se mantuvieron resilientes.
Durante 2023, el volumen de tráfico creció en promedio 18 % para los aeropuertos que califican en América Latina, lo que superó significativamente la actividad económica local con un crecimiento del PIB agregado de 1.8 % en el año.
Con un crecimiento de dos veces el PIB, la expectativa de tráfico para la región es similar a la de Estados Unidos, pero supera las de sus pares en Europa y Asia-Pacífico, donde no esperan una recuperación total hasta 2024.
"Estimamos una recuperación aún más lenta del volumen de pasajeros de negocios en Europa, que consideramos es poco probable que se recupere pronto (vea el artículo "European Airports Trundle Along", publicado el 13 de mayo de 2024)", agrega la agencia.
FACTORES
Algunos otros factores que contribuyen al crecimiento del tráfico aéreo en los próximos años son la presencia de nuevas aerolíneas de bajo costo, como la dominicana Arajet y la colombiana Wingo, así como nuevas y más frecuentes rutas de bajo costo que redujeron considerablemente los precios de los boletos, especialmente para las rutas nacionales y cortas.
Además, los viajes aéreos se están haciendo más populares debido a la deficiente infraestructura de transporte en la región, por ejemplo, la ausencia de ferrocarriles de conexión; la reducción de la brecha entre el costo de los vuelos y los de otros medios de transporte, así como los problemas de seguridad con el transporte por carretera.
Sin embargo, los indicadores financieros de los aeropuertos podrían verse presionados debido a las inversiones en infraestructura y sostenibilidad ambiental en medio de altas tasas de interés, luego del ajuste de los presupuestos al principio de la pandemia.