Por revistaeyn.com
En los últimos meses, ha habido una atención significativa en el notable aumento de las acciones tecnológicas, en particular las vinculadas a la inteligencia artificial (IA), dijeron los analistas de Wells Fargo en una nota.
Esta tendencia se hace eco de la burbuja de las puntocom de finales de la década de 1990, lo que llevó a muchos inversores y analistas a establecer paralelismos entre los dos períodos.
Al comparar el rendimiento actual del ciclo alcista del índice Nasdaq, de gran peso tecnológico, con el de finales de la década de 1990, podemos obtener información sobre las similitudes y diferencias entre estos dos fenómenos de mercado.
El auge de las tecnologías transformadoras
Una de las principales similitudes entre la burbuja de las puntocom y el mercado actual es el papel central que desempeñan las tecnologías transformadoras, reporta Investing.
A finales de la década de 1990, Internet revolucionó las industrias, impulsando un crecimiento sustancial de las acciones tecnológicas. Del mismo modo, la IA se considera actualmente una tecnología transformadora con el potencial de mejorar significativamente la eficiencia empresarial, añadió Wells Fargo.
En ambos periodos, las acciones de crecimiento de gran capitalización de EE. UU. obtuvieron un rendimiento sustancialmente superior, en particular un puñado de acciones tecnológicas asociadas con Internet y la IA.
Rendimiento y valoraciones
El rendimiento del índice Nasdaq 100 durante la burbuja de las puntocom de 1998 a 2000 exhibió un ascenso meteórico, comparable al actual mercado alcista de acciones de IA a partir del tercer trimestre de 2022.
Sin embargo, una diferencia clave radica en las valoraciones. Durante la burbuja de las puntocom, las relaciones precio/beneficio (P/E) ajustadas cíclicamente para el índice S&P 500 alcanzaron un máximo sin precedentes de 44 veces, en comparación con la valoración actual del mercado de 35 veces.
Aunque las valoraciones actuales son altas, no son tan extremas como las que se observaron durante la era de las puntocom.
Concentración del mercado
Otro factor crítico a tener en cuenta es la concentración del mercado. En el apogeo de la burbuja de las puntocom, las cinco y diez primeras acciones constituían el 17 % y el 27 % del peso del índice S&P 500, respectivamente.
Por el contrario, a partir de las últimas lecturas, estas cifras han aumentado al 30 % y al 39 %. Esta mayor concentración indica que el mercado actual está aún más dominado por unas pocas acciones de gran capitalización, principalmente en el sector tecnológico, en comparación con finales de la década de 1990.
Calidad de los líderes del mercado
Una de las diferencias más significativas entre ambos periodos es la calidad de las empresas líderes. Los líderes del mercado actual son empresas de mayor calidad con balances sólidos y operaciones rentables.
Por el contrario, a finales de la década de 1990 se produjo un número sustancial de empresas con pérdidas, especialmente entre las OPI. Esta diferencia fundamental sugiere que, si bien ambos períodos experimentaron un exceso especulativo, los líderes del mercado actual son más sólidos y financieramente sólidos.
Aumento del escepticismo y de las condiciones macroeconómicas
A pesar del entusiasmo que rodea a la IA, existe un creciente escepticismo sobre su impacto a largo plazo. A los inversores les preocupa cada vez más que los gastos de capital relacionados con la IA no se traduzcan en el crecimiento previsto de los ingresos. Este escepticismo se refleja en las recientes ventas masivas del mercado tras los decepcionantes resultados de las principales empresas tecnológicas.
Además, el entorno macroeconómico actual difiere significativamente del de finales del decenio de 1990. El período anterior se benefició de un sólido crecimiento del PIB real en promedio de alrededor del 4 %, una inflación modesta, superávits presupuestarios en transición, una demografía favorable y la relajación de las políticas de la Reserva Federal. Por el contrario, el entorno actual está marcado por la incertidumbre económica, el aumento de la inflación y las condiciones geopolíticas menos favorables.