Por Europa Press
La compañía de alimentación Constellation Brands, propietaria en Estados Unidos de marcas de cerveza como Corona o Modelo, registró unas pérdidas netas atribuidas de US$525,2 millones en su segundo trimestre fiscal, finalizado en agosto, frente a las ganancias de US$1.149,5 millones contabilizadas en el mismo periodo del ejercicio anterior.
El abultado cambio en el resultado neto se corresponde con el impacto atípico de las inversiones no consolidadas, que representó un gasto de US$1.324,7 millones en el trimestre.
Las ventas netas de la firma se situó en US$2.344 millones, un 1,9% más que en el mismo periodo del año anterior. Por segmentos de negocio, las ventas de cerveza crecieron un 7%, hasta US$1.640,4 millones, mientras que la división de vino y bebidas espirituosas se contrajo un 9%, hasta US$703,6 millones.
De su lado, el coste de los productos vendidos se elevó un 2,4%, hasta US$1.158,1 millones, al tiempo que los gastos de venta, generales y administrativos se situaron en US$464,4 millones, un 15,7% más.
En el conjunto del primer semestre fiscal, la compañía contabilizó unas pérdidas netas atribuidas de US$770,6 millones, frente a los 'números negros' de US$1.893,3 millones de los primeros seis meses del ejercicio precedente. Los ingresos netos, de su lado, se situaron en US$4.441,2 millones, un 2,2% más.
La compañía de alimentación Constellation Brands, propietaria en Estados Unidos de marcas de cerveza como Corona o Modelo, registró unas pérdidas netas atribuidas de US$525,2 millones en su segundo trimestre fiscal, finalizado en agosto, frente a las ganancias de US$1.149,5 millones contabilizadas en el mismo periodo del ejercicio anterior.
El abultado cambio en el resultado neto se corresponde con el impacto atípico de las inversiones no consolidadas, que representó un gasto de US$1.324,7 millones en el trimestre.
Las ventas netas de la firma se situó en US$2.344 millones, un 1,9% más que en el mismo periodo del año anterior. Por segmentos de negocio, las ventas de cerveza crecieron un 7%, hasta US$1.640,4 millones, mientras que la división de vino y bebidas espirituosas se contrajo un 9%, hasta US$703,6 millones.
De su lado, el coste de los productos vendidos se elevó un 2,4%, hasta US$1.158,1 millones, al tiempo que los gastos de venta, generales y administrativos se situaron en US$464,4 millones, un 15,7% más.
En el conjunto del primer semestre fiscal, la compañía contabilizó unas pérdidas netas atribuidas de US$770,6 millones, frente a los 'números negros' de US$1.893,3 millones de los primeros seis meses del ejercicio precedente. Los ingresos netos, de su lado, se situaron en US$4.441,2 millones, un 2,2% más.
