Hoy, Flor de Caña, con su gama más premium del portafolio, la línea de los Centenarios, se ha transformado en una marca global, que deleita el paladar de miles de consumidores en 50 países.
"Flor de Caña atrae a todos aquellos que quieren descubrir marcas con historia, tradición y una herencia inigualable, con un proceso único de añeja-miento natural Slow-Aged. Es un acompañante perfecto para esas ocasiones especiales, cuando el consumidor sale a divertirse y relajarse con su grupo de amigos", dice Mariana Sanabria, international Brand Development Manager.
En 1999, tras cinco generaciones, la familia Pellas tomó la iniciativa de desarrollar Flor de Caña globalmente, reposicionando la marca, haciéndola más premium e internacional. Catorce años después, con el objetivo de reforzar el posicionamiento súper premium del que hoy goza e incrementar la relevancia a una mayor audiencia global, la marca tuvo un rediseño de imagen. ese mismo año, 2013, con el lanzamiento de Centenario 25, Flor de Caña ingresó en la categoría de productos de lujo, cautivando los paladares más exigentes en la categoría de bebidas premium.

"Flor de Caña es una marca que busca innovar continuamente y capturar nuevas tendencias, para satisfacer los gustos y sorprender a sus consumidores globalmente", asegura Sanabria.