Si vives en Estados Unidos y tienes empleo, hay muchas probabilidades de que lo conserves. Los despidos masivos son prácticamente inexistentes en la economía actual. El informe gubernamental de empleo de abril mostró que la tasa de desempleo mejoró a 5,4%, el nivel más bajo en siete años.
Hubo una ganancia neta de 223.000 puestos de trabajo durante el mes, pero igual de importante es el hecho de que las pérdidas de plazas se han reducido al mínimo.
Solo 4,1 millones de personas perdieron sus empleos en abril, el número más bajo en ocho años. Durante el peor periodo para el mercado laboral, de 2009 a 2011, entre 8 millones y 10 millones de personas perdían sus empleos cada mes. Además, el número de personas que solicitaron beneficios por desempleo por primera vez en la semana que terminó el 25 de abril fue el más bajo desde cuando el mercado laboral estaba al rojo vivo en abril de 2000.
La falta de despidos es una muy buena señal, tanto para el mercado laboral actual, como para las cosas a futuro, según John Silvia, economista en jefe de Wells Fargo Securities. Antes de las empresas se comprometan a añadir una gran cantidad de puestos de trabajo, lo primero que hacen es dejar de recortar el personal que ya tienen.