'Vivimos tiempos en los que la destrucción de los paradigmas y la obligación de acostumbrarse a un mundo donde ya casi no hay nada que conservar ponen a prueba a gobernantes y a gobernados de manera permanente. Ahora España -que durante los últimos 30 años fue el referente de diversos países de América Latina para lograr un proceso pacífico de transición de una dictadura a una democracia exitosa- está viviendo uno de los fenómenos más importantes y sorpresivos de toda la crisis con el movimiento secesionista catalán y la confusa respuesta de la clase política a este desafío. Da la impresión que este momento por el que está pasando la historia española es la historia de una simulación'.
(Fuente: Antonio Navalón- ESPECIAL PARA EL PAíS)