IC Power Ltd. -filial del grupo israelí Kenon Holdings Ltd.- alcanzó un acuerdo con Deorsa-Deocsa Holdings Ltd. para comprar Energuate. La operación, prevista para enero, supone el pago de US$299,5 millones y la absorción de una deuda que, al 30 de noviembre, alcanzaba los US$289 millones.
El fondo británico de inversiones Actis adquirió, en mayo de 2011, las compañías Deorsa y Deocsa, así como la Comercializadora Mayorista de Electricidad y Redes Eléctricas de Centroamérica. Pagó un total de US$345 millones a la española Gas Natural Fenosa y, adicionalmente, asumió compromisos por US$104 millones.
Fuentes del sector eléctrico coinciden en que hubo tres factores que influyeron en el precio de la venta.
El primero fue la crisis institucional desatada por los escándalos de corrupción que obligaron a renunciar a los exgobernantes Otto Pérez Molina y Roxana Baldetti y empañaron la imagen del país ante los inversionistas extranjeros. El segundo habría sido el mal estado de la red de distribución de Energuate. "Ni Unión Fenosa ni Actis invirtieron en su infraestructura", afirman los informantes.
Y el tercer factor fue la conflictividad social. Actis heredó un problema que surgió en 2008 y que creció como espuma: el robo de energía y los impagos. A finales de 2014, el número de usuarios que se había desconectado y vuelto a conectar sin contador superaba los 230.000, es decir, el 15 % del total.