'Logramos avances en las conversaciones', dijo el portavoz del FMI, Gerry Rice en una rueda de prensa en Washington, haciéndose eco de declaraciones similares de una fuente europea.
Los representantes de los proveedores de fondos para Grecia se reunieron la noche del miércoles para tratar de resolver sus diferencias sobre las medidas exigidas a Atenas, dirigidas a que cumpla los objetivos presupuestarios que le fueron marcados el pasado verano boreal a cambio de financiación por 86.000 millones de euros de préstamos europeos.
'Nadie va a dejar que esto (las diferencias entre el FMI y la UE, ndlr) se deteriore. Esto se resolverá pronto', dijo otra fuente europea bajo condición de anonimato.
El portavoz del FMI aseguró también que era esencial definir claramente las medidas necesarias de ajustes económicos --sobre todo en jubilaciones-- para que Grecia pueda cumplir con su objetivo de superávit primario (excluyendo los cargos de servicio de la deuda) de 3,5%.
'Esto nunca se ha cuantificado o aclarado', aseguró Rice, reclamando a los europeos tener en cuenta sus responsabilidades.
El FMI, que ha participado en los dos rescates internacionales anteriores de Grecia, condiciona su participación en el plan de ayuda a que se brinden garantías de que la deuda griega será manejable, tanto a través de las medidas de ahorro en el gasto público, como de las ayudas financieras otorgadas por los europeos.
Ahora el organismo espera para decidirse la primera evaluación de las reformas emprendidas por Atenas desde el verano pasado, que adoptó con bastante retraso.