Centroamérica & Mundo

¿Qué está pasando en Nepal? Jóvenes hacen revuelta y lanzan consulta en línea para elegir líder

El ataque se centró primero en el corazón del Estado nepalí. Los tres poderes, legislativo, ejecutivo y judicial, fueron asaltados, buscando paralizar por completo la maquinaria gubernamental. La edición del diario nepalí 'The Kathmandu Post' salió y publica desde las cenizas y titula: "Esto no somos nosotros".

2025-09-10

Por revistaeyn.com

Nepal está en caos. Una revuelta juvenil sacudió la zona entre el 8 y 9 de septiembre y dejó un rastro de destrucción sistemática.

Los ataques no fueron aleatorios, sino que se dirigieron a los principales símbolos del poder político, administrativo y económico, en un intento por desmantelar físicamente un sistema que los manifestantes ya no consideran legítimo.

La furia de los manifestantes, que en 48 horas dejó 30 muertos, se materializó ayer en una oleada de ataques coordinados. La turba alcanzó el Parlamento, residencias de políticos y sedes de partidos, y finalmente arrasó los pisos superiores del edificio en el Central Business Park que albergaba la sede del diario nepalí 'The Kathmandu Post', el principal diario de Nepal.

Israel ataca a Hamás en Catar mientras negociaban tregua

Los grupos rechazaron cualquier relación con la liberación del líder de la oposición Rabi Lamichhane, y remarcaron el carácter apartidista de la protesta. En redes circularon plantillas con el lema "No apoyamos a Rabi Lamichhane, al RSP, a monárquicos, populistas ni oportunistas", compartidas miles de veces.

Este levantamiento juvenil, que carece de un liderazgo unificado o una estructura jerárquica clara, fue convocado y coordinado de forma orgánica a través de redes sociales por diversos colectivos que llamaron a la juventud de la 'Generación Z' (nacidos entre 1997 y 2012)", sin una cabeza visible que centralizara las decisiones.

Esta naturaleza acéfala, que fue clave para su rápida expansión y su carácter genuino, ha dejado un vacío político que, sumado a la violencia de las últimas jornadas, ha intensificado la presión para que los organizadores estructuren un liderazgo visible capaz de negociar una salida y contener la crisis.

Jóvenes de la revuelta de Nepal lanzan consulta en línea para elegir líder

Miembros del movimiento juvenil que provocó la renuncia del Gobierno de Nepal ha lanzado este miércoles una consulta abierta en redes sociales para que la ciudadanía elija a los representantes que se sentarán a negociar con el Ejército una salida a la crisis, en un inédito ejercicio de democracia digital surgido del caos.

Tras recibir una propuesta de diálogo por parte de las fuerzas armadas, que ahora controlan el país, los colectivos organizadores han optado por un proceso participativo para designar a sus líderes.

"Esta protesta fue impulsada por la juventud, y ahora queremos representantes en la mesa", señaló en un comunicado Hami Nepal, uno de los grupos más influyentes, pidiendo a sus seguidores que recomienden candidatos.

"El Gobierno y el Ejército nos han pedido colectivamente abrir negociaciones. Esta protesta fue impulsada por la juventud, y ahora queremos representantes en la mesa", señaló en un comunicado.

"Queremos alguien capaz, responsable y con visión de futuro", añadieron, subrayando que se trata de un movimiento colectivo y que la decisión sobre quién debe representarles también debe tomarse de forma colectiva.

La iniciativa se produce después de que el Ejército asumiera el control de la seguridad del país, extendiera el toque de queda a nivel nacional y se mostrara dispuesto a facilitar conversaciones para buscar una salida política a la crisis.

Periódico publica desde las cenizas en Nepal

La destrucción del periódico 'The Kathmandu Post' es también paradójica, pues sus investigaciones sobre el nepotismo de la élite, conocidas como el fenómeno "Nepo Kid", habían sido clave para alimentar el descontento popular. "La gente habla de corrupción y olvida las historias que Kantipur ha destapado en sus portadas. Es un acto sin sentido", lamentó Kaphle.

El resultado de la noche de trabajo fue la histórica edición en PDF de este miércoles del The Kathmandu Post, que es en sí misma una crónica de la encrucijada que vive Nepal.

Bajo un titular principal, "'Esto no somos nosotros': Grupos de la Generación Z se distancian del vandalismo", el diario otorga la voz a los organizadores originales de la revuelta, quienes denuncian que su movimiento ha sido "secuestrado" por fuerzas oportunistas.

Al mismo tiempo, la primera plana, dominada por una imagen de edificios en llamas, documenta la magnitud de la catástrofe con otros dos artículos: uno que detalla la destrucción de "edificios históricos y archivos nacionales vitales", y otro que narra cómo "las protestas violentas barrieron la nación", incendiando oficinas y residencias de líderes.

Las instituciones del Estado, reducidas a cenizas

El ataque se centró primero en el corazón del Estado nepalí. Los tres poderes, legislativo, ejecutivo y judicial, fueron asaltados, buscando paralizar por completo la maquinaria gubernamental. El mensaje fue claro: un rechazo total a las instituciones.

Parlamento Federal: Asaltado e incendiado.

Complejo Administrativo (Singha Durbar): Incendiado, afectando a decenas de oficinas ministeriales.

Oficina del Primer Ministro: Incendiada.

Corte Suprema: Destruida por el fuego, paralizando el poder judicial.

Palacio Presidencial: Atacado e incendiado.

Residencia Oficial del Primer Ministro: Incendiada.

Sistema Penitenciario: Múltiples prisiones asaltadas, con más de 2.000 fugados. La cárcel de Nakhu en Katmandú fue parcialmente incendiada.

Puestos de Policía: Varios puestos fronterizos incendiados.

Ataques directos a la clase política

La ira de los manifestantes no se quedó en los edificios, sino que se dirigió de forma personal y violenta contra la élite política, a la que consideran responsable de la corrupción y de la represión. Los ataques a sus residencias privadas marcaron uno de los puntos más trágicos y brutales de la revuelta.

Residencias Privadas: Incendiadas las viviendas del ya ex primer ministro K.P. Sharma Oli, del ministro de Comunicación y del ex primer ministro Jhalanath Khanal, ataque que resultó en la muerte de su esposa.

Agresiones: El ex primer ministro Sher Bahadur Deuba fue agredido físicamente en el asalto a su residencia.

Sedes de Partidos: La oficina central del Congreso Nepalí fue incendiada.

El sector privado y la prensa

La destrucción también alcanzó a símbolos del poder económico y mediático, percibidos por los manifestantes como parte del mismo 'establishment'. Los ataques buscaron golpear no solo al Gobierno, sino también a las estructuras que consideran cómplices del sistema.

Hoteles: El Hotel Hilton de Katmandú fue destruido por un incendio.

Medios de Comunicación: Las oficinas de Kantipur Media Group, el mayor conglomerado de prensa del país, fueron incendiadas y sus servidores desconectados.

Comercios: Varios concesionarios de automóviles fueron incendiados.

Infraestructura y logística paralizadas

Finalmente, la revuelta provocó el colapso de la infraestructura clave del país, aislando a Nepal del exterior y paralizando por completo la vida cotidiana y la actividad económica.

Aeropuerto Internacional de Katmandú: Cerrado y puesto bajo control militar tras un intento de asalto.

Comercio y Turismo: Parálisis total de la actividad comercial en la capital, afectando a tiendas, farmacias y obligando a los turistas a refugiarse.

12 ejemplares al año por $75

SUSCRIBIRSE