Por estrategiaynegocios.net
La cadena de suministro de las empresas que abastecen productos y alimentos, se ha visto obligada a transformarse mediante plataformas digitales desde 2020, debido al impacto de la pandemia del COVID-19 y problemas de abastecimiento en materias primas y la dependencia en terceras partes.
La cadena de suministro o “supply chain” se refiere a una serie de procesos que implican el recorrido de un bien, desde la extracción de las materias primas hasta la entrega del producto final al consumidor.
En repetidas ocasiones, el estado del abastecimiento global ha alertado que cada vez será más necesario ser rápidos en la diversificación de los centros de suministro para no depender excesivamente de ningún tercero, y flexibilizar las cadenas para estar preparados a factores externos, pero también garantizar la operación interna, en especial para esas empresas que fabrican sus propios productos y evitar paros en sus cadenas de producción.
“En todas las planificaciones referentes al supply chain, juega un papel importante la digitalización y el disponer de información en tiempo real y lo más precisa posible, así como la colaboración y coordinación para garantizar la visibilidad de las cadenas y sus datos. Esto permite a las empresas tener procesos de control, así como mantenimiento predictivo que garantizan la continuidad del negocio”, comentó César Arteaga, desarrollador de negocios de Sistemas de UPS Trifásicos y Aires Acondicionados en Schneider Electric.
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Según los últimos datos recogidos por el Banco de la Reserva Federal de Nueva York, hasta febrero de 2022, el Índice de Presión en la Cadena de Suministro Global apuntaba a una relajación de las presiones de la cadena de suministro mundial desde diciembre de 2021, aunque se mantienen en niveles históricamente altos y este es un panorama que continúa durante el 2022.
En el periodo de la pospandemia, las empresas son cada vez más dinámicas en sus operaciones, capaces de buscar nuevos recursos y aprovechar herramientas más modernas para gestionar toda la cadena de suministro.
Algunas de las principales tendencias a las que, según los expertos, habrá que prestar atención con miras al próximo 2023 son:
● Transformaciones aceleradas en la cadena de suministros digitales: soluciones como las plataformas de gestión de inventarios, energía y mantenimiento que agilizan la cadena de suministro y mejoran el día a día de las organizaciones al evitar interrupciones.
● Inteligencia artificial y robótica en el supply chain: permiten automatizar los procesos operativos de la cadena de suministro, agilizando y aumentando la productividad, además de mitigar los errores.
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● Una cadena de suministro más sostenible: La responsabilidad social, la reducción de residuos, el incentivo al reciclaje, las auditorías, entre otros, son conceptos que deben estar en el radar de las organizaciones.
● Computación en la nube: ha permitido nuevos modelos de negocio para la cadena de suministro, lo que permite el acceso remoto al software con seguridad y agilidad.
● Big Data: la empresa puede capturar, almacenar y analizar datos de forma inteligente. Para el supply chain esto significa una gestión más inteligente de los productos, los recursos, la mano de obra y los costos, lo que repercute en todos los procesos de producción.
● Digital Twins: Los gemelos digitales son representaciones digitales de algo que existe físicamente. Estas simulaciones se crean a partir de la integración de sensores, que recogen los movimientos de un elemento físico y realizan proyecciones en entornos virtuales. Los gemelos digitales permiten la convergencia de los procesos y garantizan una visión integrada de toda la organización.
