Por revistaeyn.com
El guatemalteco Banco Industrial (BI) anunció que integró la blockchain para potenciar el envío y recepción de remesas desde Estados Unidos.
El banco firmó una alianza con la fintech SukuPay para modernizar los pagos transfronterizos mediante “una infraestructura cripto invisible” que potencia a su nueva aplicación ZIGI.
De acuerdo con un comunicado, el acuerdo marca un antes y un después en las alianzas entre bancos y empresas fintech, y posiciona a BI —el banco más grande de Guatemala— como pionero en finanzas impulsadas por blockchain.
El acuerdo permitirá a los usuarios de ZIGI recibir dinero desde Estados Unidos por una tarifa fija de US$0.99 utilizando solo un número de teléfono dentro de su aplicación, sin necesidad de recurrir a billeteras de criptomonedas ni entender aspectos técnicos del mundo blockchain.
”Con la infraestructura de SukuPay integrada directamente en ZIGI, no solo mejoramos los envíos de dinero, sino que establecemos un nuevo estándar”, destacó Michel Caputi, jefe de la División de Alianzas Estratégicas de BI, quien añadió que esta es una solución moderna que les coloca como líderes en el rubro en América Latina.
De acuerdo con el portal Coindesk.com, el desarrollador de SukuPay, Suku presentó la herramienta de pago en abril de 2024 como una forma de permitir transferencias de dinero transfronterizas sin necesidad de crear una billetera criptográfica, la cual está construida sobre la red de escalado Ethereum Polygon y que utiliza la stablecoin USDC.
¿Cómo funciona la recepción de remesas con ZIGI?
De acuerdo con las empresas, los remitentes pueden gestionar las remesas desde la billetera electrónica de SukuPay, la cual pueden recargar en más de 50.000 tiendas en Estados Unidos.
SukuPay permite a los remitentes en Estados Unidos enviar dinero con solo su número de teléfono estadounidense y seguir un breve proceso de validación. Una vez completado, se puede agregar dinero a la Wallet Suku mediante tarjeta de débito o efectivo.
Actualmente, existen puntos de recarga en 21 de los 50 estados de Estados Unidos, incluyendo California, Florida, Texas, Illinois, Maryland, Massachusetts, entre otros, para realizar el envío a los usuarios de ZIGI en Guatemala.
“El proceso es sencillo: el usuario puede generar una solicitud de dinero directamente desde ZIGI hacia cualquier número telefónico de Estados Unidos. Una vez enviada, la solicitud no tiene fecha de vencimiento mientras no se modifique el número asociado a la cuenta ZIGI. Gracias a la tecnología blockchain implementada por SukuPay -, la acreditación de los fondos se realiza en cuestión de segundos, las 24 horas del día, todos los días del año”, apunta BI en un comunicado.
Yonathan Lapchik, director general de SukuPay, resaltó que al integrar SukuPay dentro de ZIGI, “BI se ha convertido en el primer banco de América Latina en adoptar completamente las vías de pago con stablecoins como motor central de envíos de dinero. No ofrecemos un producto criptográfico. Impulsamos los pagos del mundo real que verdaderamente funcionan para personas reales, bancarizadas o no”.
En Guatemala, el usuario puede generar una solicitud de dinero directamente desde ZIGI hacia cualquier número telefónico de Estados Unidos.
Además, los límites de envío están definidos por SukuPay, en cumplimiento con las regulaciones de prevención de lavado de dinero, en tanto que para los receptores, se ha establecido un límite de dos transacciones por día, quince por mes y un máximo de US$3.000 por transacción y pueden hacer los retiros en la red de cajeros automáticos de BI, o utilizarlo para pagar con códigos QR directamente desde la app ZIGI.
¿El uso de la blockchain reduce el costo de las remesas?
Las remesas son importantes para la economía de Guatemala. Según datos oficiales, anualmente entran al país alrededor de USD US$21.000 millones por este concepto, lo que representa casi el 20 % del Producto Interno Bruto (PIB) de Guatemala.
De acuerdo con BI, ZIGI se consolida como un avance significativo en la forma de enviar y recibir dinero entre Estados Unidos y Guatemala, con una propuesta digital, segura, eficiente y hasta un 67 % más económica que los métodos tradicionales.