Por revistaeyn.com
El bitcoin batió un nuevo récord, superando la barrera de los US$109.000, antes de la toma de posesión del presidente Donald Trump en Estados Unidos, que podría flexibilizar las regulaciones sobre divisas digitales.
Sin embargo, unas horas después retrocedió y a la mañana del lunes 20 de enero se cotizaba en aproximadamente US$105.300.

Trump mencionó el rendimiento récord del activo en un discurso el domingo junto con las ganancias en el mercado bursátil estadounidense en general.
“Desde las elecciones, el mercado de valores ha subido y el optimismo de las pequeñas empresas se ha disparado un récord de 41 puntos a un máximo de 39 años. Bitcoin ha batido un récord tras otro”, dijo Trump.
Cabe recordar que el bitcoin superó los US$100.000 por primera vez a principios de diciembre después de que Trump nombrara a Paul Atkins, partidario de las criptodivisas, para dirigir la Comisión de Bolsa y Valores (SEC, por sus siglas e inglés), el ente regulador financiero estadounidense, una decisión que reforzó el optimismo de que el nuevo presidente desregulará el sector.
La principal criptomoneda revirtió las pérdidas de más temprano en el día cuando cayó a casi US$100,000 desde un máximo de más de US$102,000 el domingo cuando la primera dama Melania Trump emitió una memecoin, alejando la liquidez de los principales activos.
Trump ha expresado su apoyo a las criptomonedas durante su campaña. Promesas como convertir a Estados Unidos en la “capital de las criptomonedas del planeta” y crear una “reserva nacional estratégica de bitcoin” han alimentado el optimismo de los inversores.
A pesar de haber considerado que las criptodivisas eran una “estafa”, Trump cambió su postura y fue uno de sus principales defensores durante su campaña electoral.
El bitcoin fue concebido en 2008 por una persona o grupo que escribía bajo el nombre de Satoshi Nakamoto y se presentó como una forma de liberarse de las principales instituciones financieras mediante una plataforma descentralizada para realizar las transacciones.
Las principales críticas ante estas divisas digitales es que permite realizar pagos imposibles de rastrear en la llamada ‘web oscura’, una parte oculta de Internet utilizada para actividades delictivas como el blanqueo de dinero y permitir la extorsión.
Con información de DW y Coindesk