Por revistaeyn.com
La Semana Santa es una de las temporadas preferidas para explorar nuevos destinos nacionales e internacionales. Pero en un contexto de alta demanda, fluctuación del dólar o el euro y nuevos costos asociados al turismo internacional, organizar un viaje dejó de ser solo un reto logístico para convertirse en un verdadero ejercicio de planeación financiera.
“Ya no se trata solo de tener el pasaporte en regla o empacar la maleta. Hoy, la clave está en cómo usamos nuestro dinero en distintos países y monedas. Es ahí donde se define si unas vacaciones se disfrutan o se convierten en una carga financiera”, explica Santiago Mejía, Country Manager de Global66 en Colombia.
Aunque muchos planean con antelación sus viajes, pocos tienen en cuenta los efectos que puede tener el manejo ineficiente del dinero en el extranjero. Costos ocultos por cambio de divisa, comisiones bancarias, retiros en cajeros del exterior y conversiones no anticipadas pueden encarecer el viaje hasta en un 10 %.
Durante temporadas como Semana Santa, las tarifas de vuelos y hospedajes pueden cambiar hasta un 30 % de un día para otro. Pero más allá de las alzas propias del mercado, hay un problema silencioso: pagar en moneda local sin evaluar la conversión real. Muchas plataformas ofrecen precios en pesos colombianos, pero aplican tasas internas poco competitivas, que elevan el costo final de la transacción.
“Creer que pagar en pesos es siempre más económico es un error común. Contar con herramientas que permiten pagar en la moneda del comercio, sin costos ocultos, puede representar un ahorro inmediato y significativo”, agrega Mejía.
Basados en la experiencia de miles de usuarios en toda Latinoamérica, la fintech comparte cuatro recomendaciones esenciales para planificar un viaje internacional con una correcta gestión financiera:
Monitorear el tipo de cambio con anticipación: El dólar y el euro fluctúan constantemente. Observar sus movimientos días o semanas antes del viaje puede ayudarte a convertir divisas en el mejor momento y evitar pagar más por la misma cantidad de dinero.
Evitar soluciones con costos ocultos: Muchas tarjetas o plataformas aplican comisiones internacionales, recargos por conversión o tasas desfavorables.
Minimizar los retiros en efectivo: Retirar dinero en cajeros del exterior puede generar cargos de hasta un 10 %. La recomendación es llevar una cuenta con saldo en la moneda del destino y priorizar los pagos digitales con tarjetas que no cobren comisiones.
Blindarse de fraudes: En línea a lo anterior, cuidarse de fraudes y filtraciones tanto en entornos digitales como físicos es una necesidad, y aquí la tokenización se posiciona como una solución efectiva.
Realizar un análisis de sus finanzas personales: Es fácil caer en gastos innecesarios durante las vacaciones, por ende es de vital importancia que haga un análisis consciente de su situación económica actual, teniendo en cuenta sus ingresos y gastos mensuales. Debe considerar cada movimiento de dinero que representan estos días para salidas, viajes, y planes. Con los montos claros logrará tener un panorama de límites para su bolsillo, evitando exceder su capacidad financiera.
“Viajar en Semana Santa cuidando el bolsillo no solo es posible, es cada vez más necesario. Las herramientas están al alcance: el reto es usarlas con inteligencia y convertir la planeación financiera en un pasaporte más para moverse con libertad”, concluye el Country Manager.