La región América Latina y el Caribe tendrá un crecimiento del PIB de 2,1% en 2022, muy por debajo del 6,2% del año pasado, estimó este jueves la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal).
'Vemos algo muy preocupante. Venimos de una tasa de crecimiento de 6,2% y nos vamos a ir a un 2,1%. Va a haber una desaceleración muy importante del crecimiento en toda la región', dijo la secretaria ejecutiva de la Cepal, Alicia Bárcena, en una conferencia virtual desde Ciudad de México para presentar las previsiones del organismo para 2022.
Por regiones, la Cepal estimó que el Caribe crecerá 6,1% impulsado sobre todo por el repunte del turismo, América Central un 4,5% y América del Sur, un 1,4%.
Según el reporte, la región enfrenta un 2022 muy complejo: persistencia e incertidumbre sobre la evolución de la pandemia, fuerte desaceleración del crecimiento, se mantienen la baja inversión, productividad y lenta recuperación del empleo, persistencia de los efectos sociales provocados por la crisis, menor espacio fiscal, aumentos en las presiones inflacionarias y desequilibrios financieros.
Por países, la Cepal estima que Brasil, la mayor economía de la región, crecerá 0,5%, mientras que México vería una expansión del 2,9%. Argentina, en tanto, crecería a una tasa de 2,2% este año.
Problemas estructurales
El organismo aseguró que la región enfrentará un 2022 complejo, principalmente por la incertidumbre sobre la evolución de la pandemia de Covid-19, con inversión disminuida, lenta recuperación de empleos, menor espacio fiscal, más presiones inflacionarias y desequilibrios financieros.La inversión y la productividad son 'problemas estructurales que siguen condicionando esta posibilidad de sostener una recuperación más allá de lo que vimos en 2021', explicó Bárcena.
En América Latina y el Caribe la inversión respecto al PIB 'es de 19,5%, es una de las inversiones más bajas de las últimas tres décadas, y desde luego la más baja de todo el mundo', enfatizó.
El promedio de ese rubro en las economías desarrolladas es de 22,4% y de 26,8% a nivel mundial, apuntó.
Añadió que el motor de crecimiento en 2021 'fue sin duda el consumo, al que se sumaron exportaciones y la formación bruta de capital fijo'.
Destacó también que 'el mayor número de remesas apuntaló el consumo privado' regional, especialmente en México y Centroamérica, apoyado por la recuperación de Estados Unidos.
Sin embargo, en 2021 el empleo se recuperó a menor velocidad que la actividad económica. Un 30% de los empleos perdidos en 2020 aún no se recuperaban en 2021, añadió el informe.
'Daño duradero'
'La pandemia ha infligido un daño duradero al crecimiento de las economías', agravado por problemas estructurales previos a la crisis como la 'informalidad, desocupación y escasez de cobertura en los sistemas de protección social', resaltó Bárcena.Estimó además que las presiones inflacionarias globales, por aumentos en los precios de alimentos y en la energía, continuarán afectando a la región en 2022.
En tanto, la desigualdad laboral entre hombres y mujeres se acentuó en 2021.
'Más de un 38% de los trabajos ocupados por mujeres que se destruyeron durante la crisis no se recuperaron. En el caso de los hombres este número es de 21%', dijo Bárcena.
Para este año, las tasas de desocupación estimadas en la región serían de 12,4% para las mujeres y de 10,2% para los hombres.
Balance Preliminar de las Economías de América Latina y el Caribe 2021. https://t.co/hw3zxvNZLW
- CEPAL (@cepal_onu) January 12, 2022