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Liberan pichones de guacamaya roja en Reserva de la Biósfera Maya

La liberación de pichones, criados en laboratorio o rescatados, se llevó a cabo en el campamento Laguna El Perú.

2024-09-13

Por revistaeyn.com

Gracias a los esfuerzos conjuntos de Grupo AJE, a través de su marca de agua Cielo, y Wildlife Conservation Society (WCS), 10 pichones de guacamaya roja (Ara macao cyanoptera), especie altamente amenazada y vulnerable en Guatemala, fueron liberados de la jaula de vuelo del campamento Laguna El Perú, en el corazón de la Reserva de la Biosfera Maya (RBM), en el Parque Nacional La Laguna del Tigre.

Este es el segundo año consecutivo en que ocurre una liberación de pichones, después de que el proyecto de conservación de esta especie se retomara en el 2022.

MÁS ALLÁ DE LA LIBERACIÓN

Después de la apertura de la jaula, el personal del laboratorio se retira temporalmente para que no haya interacción de los pichones recién liberados con los seres humanos; lo cual les ayuda a evitar que bajen al suelo y quieran buscar comida o interactuar con los técnicos que los alimentaron.

Continúan esfuerzos para conservación de la Guacamaya Roja en Guatemala

A partir del día de la liberación una persona deja comida y agua sobre la jaula mientras que las aves se acostumbran a buscar su propio alimento en la selva. Esta etapa es parte del monitoreo y se realiza durante unos meses, cada vez con menos frecuencia hasta que las guacamayas sean independientes.

“Junto con otras iniciativas para proteger la biodiversidad de la Reserva de la Biósfera Maya (RBM), la protección de la guacamaya roja busca generar impactos positivos en la biodiversidad de la región. El incremento en la población de guacamayas es un indicador de un ecosistema sano”, comentó Fernando Matheu, Jefe de Sostenibilidad de AJE para Centroamérica.

UN APOYO CONSTANTE

El programa que apoya AJE incluye el monitoreo de nidos naturales, la habilitación de nidos artificiales y el acompañamiento después de la liberación.

“Estamos incrementando la disponibilidad de sitios de anidación mediante la ampliación de cavidades naturales, la instalación de nidos artificiales a prueba de halcones y la prevención de infestaciones de abejas africanas, que compiten por las cavidades y pueden ser letales para los pichones”, comentó Rony García-Anleu, Director del Departamento de Investigaciones Biológicas de WCS a cargo del laboratorio.

Agregó que para la temporada 2024, han registrado 33 nidos activos y continúan monitoreando el número de pichones que logran volar, calculando así el Índice de Éxito Reproductivo.

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