La titular del juzgado de delitos contra el ambiente de Petén (norte), Carla Hernández, dijo que ordenó el cierre por seis meses de la empresa Reforestadora de Palma de Petén, S.A. (Repsa) para que fiscales realicen una investigación.
En ese tiempo autoridades del Ministerio Público (Fiscalía) podrán recabar evidencias y determinar si la firma local tuvo responsabilidad en la contaminación del río La Pasión, comentó Hernández.
El director ejecutivo del querellante Centro de Acción Legal, Ambiental y Social (Calas), Rafael Maldonado, consideró que la decisión judicial es 'un precedente legal más en cuanto al delito de contaminación industrial en Guatemala'.
Explicó que Calas solicitó la medida precautoria para proteger 'el ecosistema y comunidades circunvecinas del río La Pasión en Sayaxché, Petén', unos 500 km al norte de la capital guatemalteca.
El 21 de julio, el Sistema de Naciones Unidas en Guatemala lamentó el 'desastre ecológico' causado por la contaminación con pesticidas usados en la producción de aceite de palma africana, que afectó a miles de personas en el norte del país.
La contaminación se dio a conocer a principios de junio pasado debido a una mortandad de miles de peces que las autoridades calificaron de 'ecocidio'.
El desastre afectó a unas 23 especies de peces y se estudia el daño que pudieron sufrir 21 variedades de mamíferos, aves y reptiles, según el estatal Consejo Nacional de áreas Protegidas (Conap).
En tanto, comunidades afectadas por la contaminación hídrica anunciaron el 29 de junio que acudirán a la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) para pedir justicia.
Datos oficiales indican que en Guatemala están cultivadas unas 130.000 hectáreas de palma africana, principalmente en el norte y sur del país.
'La tercera parte del total de la producción de palma africana a nivel nacional se encuentra en Sayaxte, donde el 71% de población es indígena y la superficie de cultivos de subsistencia (maíz y frijol) es únicamente un 0,66%', lamenta en un informe el Sistema de la ONU.
En Guatemala el 42% de los 15 millones de habitantes son indígenas, según fuentes oficiales, pero entidades autóctonas afirman que son más del 60% de la población.
La pobreza alcanza al 54% de la población y en pueblos indígenas el porcentaje es hasta de un 80%.