La viceministra de Integración y Comercio Exterior del Ministerio de Economía, María Luisa Flores, contradijo a las autoridades de Honduras, quienes aseguran que la fecha del 1 de diciembre debe aplazarse.
Según Flores, la posición de Guatemala es optimista para que el Protocolo Habilitante para completar la integración de la Unión Aduanera con Honduras se apruebe antes de esa fecha, como lo establece la hoja de ruta acordada por ambos países centroamericanos.
La confianza de Flores se basa en que hace menos de un mes la iniciativa fue enviada a la Comisión de Relaciones Exteriores del Congreso de la República. "Es una ley no polémica y que no representa ningún desgaste para el diputado", agregó.
Por aparte, el diputado e integrante de la Comisión, Jean Paul Briere, está de acuerdo en que la aprobación del documento no compite con ningún partido político y reconoció la importancia de ratificar el Protocolo "lo antes posible". Pero señaló que los tiempos políticos no han permitido conocer el tema en el Palacio Legislativo.
Flores indicó que durante la V Ronda de Negociaciones, que concluyó el 4 de septiembre en Tegucigalpa, no hubo ningún comentario contrario a una ratificación. "Estaban conscientes del Protocolo Habilitante. En un mes podría aprobarlo el Congreso hondureño", afirmó.
Briere no descartó que el Protocolo se conozca de "urgencia nacional" y se apruebe con 105 votos. "Tenemos hasta el próximo 30 de noviembre para hacerlo", aclaró el legislador.
Respaldo empresarial
Flores destacó el apoyo que han recibido por parte del sector privado. En julio pasado los empresarios solicitaron a los diputados aprobar el Protocolo Habilitante de Unión Aduanera con Honduras, señaló. "Han manifestado interés y complacencia en que el documento sea ratificado", agregó.
En opinión de Flores, esta unión mejorará el comercio y permitirá un crecimiento del uno por ciento en el PIB guatemalteco. Pero ante una posible falta de apoyo de los diputados guatemaltecos, los empresarios expresan que habrían efectos nocivos sobre el comercio y la economía del país.
Javier Zepeda director ejecutivo de la Cámara de Industria expresó que de no ratificarse el protocolo en este periodo legislativo, habría que empezar de nuevo con otro gobierno y eso representaría un atraso en un "esfuerzo" que ha tomado más de 50 años.
"El impacto lo absorbería la competitividad de la región centroamericana. Del lado de los exportadores, se perdería la oportunidad de tener un tránsito más ágil para su mercadería, así como el impacto en los costos", explicó Zepeda.
La directora de la División Competitividad de la Asociación Guatemalteca de Exportadores (Agexport), Fanny D. Estrada, señaló que sería una mala señal para la voluntad plasmada por las dos naciones centroamericanas. "Es una ley muy sencilla, de dos artículos. Sería lamentable si el Congreso no lo ratifica", agregó.
Según Estrada, confirmar la integración aduanera no tiene ninguna implicación negativa, solo beneficios y no afecta a ningún sector empresarial. "Esperamos que sea algo simple de tratar en el Congreso, y no se prolongue", afirmó.
"Los temas económicos han resistido bastante a lo político. Pero no se puede permitir que el impasse persista y afecte el bolsillo de los guatemaltecos", evidenció la representante de Agexport.
Confusión
María Luisa Flores, viceministra de Comercio Exterior, calificó como "confusión" la forma en que se tomaron las declaraciones del ministro de Desarrollo Económico de Honduras, Alden Rivera, en las que afirmó que la integración tardaría 30 o 60 días más de lo esperado.
Según Flores, las palabras de Rivera se dieron previo a realizarse la última ronda de negociaciones en Tegucigalpa. Flores indicó que se prevén reuniones entre representantes de ambas naciones en octubre y noviembre próximo para conocer avances en los tres pilares de la unión aduanera.
