Por revistaeyn.com
La activista Rigoberta Menchú, Premio Nobel de la Paz 1992, recibió este miércoles su carta de naturalización como mexicana de manos del canciller Juan Ramón de la Fuente, en representación de la presidenta de México, Claudia Sheinbaum.
Desde la sede de la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE), De la Fuente reconoció la trayectoria de Menchú en la defensa de los derechos humanos y de los pueblos indígenas.
Además, resaltó sus aportaciones a la vida académica en diversas universidades tanto de México como del extranjero.
“En la sede de la SRE, el canciller Juan Ramón de la Fuente recibió, a nombre de la presidenta Claudia Sheinbaum, a Rigoberta Menchú, Premio Nobel de la Paz 1992, a quien entregó su carta de naturalización la cual la acredita como mexicana”, informó la Secretaría de Relaciones Exteriores.
La activista guatemalteca ha tenido una relación cercana con México desde hace décadas, especialmente tras el exilio que vivió en el país durante el conflicto armado en Guatemala.
En 1981, se exilió en México para escapar de la sangrienta guerra civil en su país, que dejó más de 200.000 muertos y desaparecidos entre 1960 y 1996.
Su trabajo ha influido en múltiples iniciativas relacionadas con los derechos de las mujeres, los pueblos originarios y la educación intercultural.
Incluso, su medalla y el pergamino del Premio Nobel se encuentran en el Museo del Templo Mayor (MTM) en Ciudad de México.
La entrega del documento simboliza el reconocimiento del Estado mexicano a una figura emblemática de la lucha indígena en América Latina.
¿QUIÉN ES RIGOBERTA MENCHÚ?
Rigoberta Menchú Tum es una activista guatemalteca nacida el 9 de enero de 1959 en Chimel, Uspantán, Quiché. Recibió el Premio Nobel de la Paz en 1992 por su trabajo en defensa de los derechos humanos, donde entró tras vivir una infancia rodeada de abusos y violencia a manos de militares.
Su padre, Vicente Menchú, murió en 1980 junto con otras 36 personas durante el desalojo violento de las fuerzas estatales a la embajada de España en la capital guatemalteca, que había sido tomada por indígenas, campesinos y estudiantes para denunciar la represión militar.
Su madre también murió tras ser secuestrada y torturada por los militares.
Además, es embajadora de los pueblos indígenas del mundo de la UNESCO.
Con información de EFE