Por revistaeyn.com
La economía hondureña mantiene su dinámica y, a octubre de 2024 mostró un crecimiento acumulado de 4,1 %. Este resultado positivo se atribuye especialmente a la mayor demanda interna destinada al consumo e inversión privada, impulsando el dinamismo en la producción bienes y servicios, reporta el Banco Central de Honduras (BCH).
Las actividades que mostraron mayor contribución al IMAE global fueron la Intermediación Financiera; Comercio; Comunicaciones; Construcción Privada; Electricidad y Agua; y Hoteles y Restaurantes.
La actividad de intermediación financiera registró un crecimiento de 12 %, impulsado por mayores intereses sobre préstamos de la banca privada y Fondos de Inversión BCHBanhprovi; asimismo, por comisiones del financiamiento otorgado a las actividades económicas y hogares, servicios de giros y transferencias, y uso del dinero plástico (tarjetas de crédito y débito), en los diferentes comercios a nivel nacional e internacional, indica el BCH.
El comercio aumentó 5,1 %, explicado por el impulso en las ventas de productos alimenticios, vehículos y repuestos, aparatos de uso doméstico; combustibles; farmacéuticos; y maquinaria para la agricultura y construcción; contribuyendo en parte- la desaceleración observada en la variación de los precios en algunos productos.
Con respecto a las comunicaciones, el incremento en el tráfico de telefonía móvil, almacenamiento de datos, soluciones de ciberseguridad y aplicaciones tecnológicas, sumado al mayor número de suscriptores de internet residencial y móvil con conectividad de banda ancha; favoreció el rubro de las telecomunicaciones al reportar el alza de 4 %, ante la continua incorporación de tecnología para mejorar la eficiencia en los servicios prestados.
Las actividades agrícolas alcanzaron igual nivel de producción respecto al mismo período del año anterior, luego de registrar siete meses consecutivos de caídas; resaltando los crecimientos observados en el cultivo de hortalizas, granos básicos y caña de azúcar, por mejores rendimientos; asimismo, la producción de huevos y ganadería mostraron un desempeño positivo.
Se registró un incremento en la producción industrial de bebidas, la producción de azúcar y harinas; así como la fundición de hierro, fabricación de artículos de hormigón y cemento, estos últimos -beneficiados por la mayor demanda del sector de la construcción-. Además, se registró un aumento en la producción de productos de papel, la edición e impresión de material impreso y elaboración de jabones.
Lo anterior contribuyó parcialmente a la caída de 1,5 % en el total de la industria manufacturera, afectada por las reducciones observadas en la fabricación de Textiles y Prendas de Vestir, derivada de la contracción en la demanda externa; y de productos agroindustriales de exportación (beneficiado de café, conservación de productos de pescado aceites y grasas y cigarrillos), concentrado para animales, y conservación de carnes (res, pollo y cerdo).