Por estrategiaynegocios.net
Los titulares de despidos masivos siguen acumulándose , y los trabajadores están comprensiblemente asustados. El mercado laboral de Estados Unidos ha estado ajustado durante la mayor parte de la pandemia, con millones de vacantes más que personas disponibles para llenarlas, y los reclutadores van al extremo para cortejar a los trabajadores con altos ingresos en tecnología , finanzas y bienes raíces.
Entonces, con decenas de miles de trabajadores que pierden repentinamente sus trabajos en empresas como SAP, Paypal, Google, Amazon, IBM, Salesforce, y más, es comprensible que los impactos estén repercutiendo en todo el mercado laboral.
Los “ despidos ruidosos ” en tecnología tienen un efecto paralizante desproporcionado, dice la economista jefe de ZipRecruiter, Julia Pollak, porque están ocurriendo en empresas conocidas que acaban de experimentar un rápido crecimiento.
Además, es una “industria pionera que da forma a nuestro estado de ánimo, y una desaceleración allí está causando que los buscadores de empleo se preocupen más ampliamente de que los trabajos estén cada vez menos disponibles”.
Pero si bien estas pérdidas de empleos son repentinas y sin duda perjudiciales para las personas afectadas, no son la ola de recortes que señalarían una recesión en Estados Unidos, dicen los economistas.
“Todavía no estamos en una recesión” y es posible que no nos demos cuenta de que estamos en una hasta que termine, dijo la economista jefe de ADP, Nela Richardson a CNBC.
La tasa de desempleo de Estados Unidos se mantiene baja en 3.5 % y menos del 1 % de la fuerza laboral es despedida cada mes, cerca de mínimos históricos. El producto interno bruto aumentó más de lo esperado el mes pasado. Y las solicitudes de desempleo se redujeron en 6,000 en la última semana hasta 186,000 personas que solicitaron beneficios por desempleo. Antes de la pandemia, ese número rondaba las 200,000 personas que buscaban ayuda cada semana.
Las empresas tecnológicas pueden estar “recortando” su plantilla, añade Richardson, pero siguen invirtiendo en la creación de tecnología del futuro y, por extensión, en la fuerza laboral.
Un indicador más importante de una recesión que se avecina es una disminución en la contratación y un aumento en los despidos de trabajadores temporales, particularmente en la manufactura, dice Richardson.
A fines de 2022, un índice que mide la actividad de las fábricas mostró una contracción por primera vez desde 2020, y “la manufactura es típicamente donde comienzan las recesiones”, dice Richardson.
Los empleadores despidieron a 110.800 trabajadores temporales en los últimos cinco meses de 2022, informó The Wall Street Journal , incluidos 35.000 en diciembre, la mayor caída mensual desde principios de 2021.
Incluso si Estados Unidos entra formalmente en recesión, “será la más rara de la historia, comenzando con una tasa de desempleo del 3,5 % y donde los consumidores, en general, están en buena forma y los ingresos han aumentado. Será un tipo de recesión diferente de la que conocemos”, que son “principalmente impulsadas por la inflación y las tasas de interés más altas”, dice Richardson.
Lo que es más probable que suceda es que EE.UU. entre en un período de estanflación o en una “economía anémica” con inflación persistente. Mientras que una recesión significa que la economía se contrae, llega a un punto bajo y luego se recupera, la estanflación significa que la Reserva Federal aumenta las tasas y luego las mantiene allí, y la inflación se modera pero no alcanza su objetivo del 2 %.
