Por Claudia Contreras - revistaeyn.com
De niño aprendió a volar muy joven. Vio nacer TACA Airlines, Avianca Holdings. Fundó Volaris en México, y recientemente Key Institute, una escuela dedicada a la formación de ingenieros en El Salvador.
“Mi familia era una familia agrícola. A mí me dejaron el popurrí de inversiones que tenía. Una de esas inversiones era que me dejaron el 20% de las acciones de TACA. Ahí empieza mi camino en la aviación: cómo hacemos crecer ese 20% al 100% y cómo integramos las líneas aéreas de la región (Aviateca, Lacsa, Nica, Sansa), cómo las integramos en Grupo TACA hasta que culminamos con la fusión que se hizo con Avianca. En el camino surgió Volaris”, apuntó Roberto Kriete, miembro de la Junta Directiva del Grupo Abra y Chairman de la Junta de Avianca.
Recordó cómo Pedro Aspe, exsecretario de hacienda y crédito público de México, se le acercó para fundar una aerolínea de bajo costo. “El doctor Pedro Aspe me llamó para venir a verme. Me dijo: ‘Yo quiero armar una línea aérea de bajo costo. He analizado todos los potenciales socios industriales de la aviación. El que más me gusta es TACA y tu persona para que nos ayudes a desarrollar este proyecto y así empezó Volaris’”, dijo el alto empresario.
En el marco de IATA Aviation Day en El Salvador, Kriete señaló que la aviación es una industria cambiante con mucha adrenalina. El empresario salvadoreño aplaudió el trabajo del Gobierno de El Salvador y proyectó cómo ve los próximos 25 años. Afirmó que el país tiene el potencial de convertirse en un hub aéreo de clase mundial.
“Yo veo una flota de Airbus A350 en El Salvador volando a Asia, volando a Europa. Veo a los Airbus volando en diferentes hub, en diferentes bancos de vuelo, volando a todas las ciudades más importantes de Latinoamérica y convirtiendo a El Salvador en un hub de clase mundial. Yo lo quiero ver en mi vida. Tengo 72 años, si llego a los 82 años me doy por servido. Tiene que ser en los próximos 10 años”
Peter Cerdá, el vicepresidente regional para las Américas IATA, lo confirmó en su mensaje de inauguración. "El Salvador cuenta con todo el potencial como una referencia regional, sobre todo en el centro de investigación y el desarrollo aeronáutico. El país tiene la oportunidad de seguir ampliando su conexión aérea, atrayendo a más visitantes internacionales y también los eventos globales como los campeonatos mundiales de surf", apuntó
Para Kriete, cumplir esto va de la mano de un trabajo conjunto entre instituciones del Estado e inversión privada. Destacó la inversión de AirCity, de Grupo Aristos, una zona franca en el Aeropuerto Internacional de El Salvador que representa una inversión de US$250 millones, para atender aeromantenimiento, logística y comercio electrónico.
El ejemplo de Panamá
“El hub más importante de la región es Panamá. El Aeropuerto de Tocumen mueve 19 millones de pasajeros al año”, subrayó. “Ellos han logrado no seguir las directrices de las autoridades. Conectan de puerta a puerta sin pasar por seguridad. Eso te da ventaja competitiva. En todos los países debemos pasar por seguridad, pasajeros, equipaje, Copa Airlines no lo hace”. El empresario salvadoreño recalcó que es parte de un trabajo conjunto entre Copa Airlines con el Gobierno panameño en los últimos 25 años.
Kriete propuso ratificar que un avión vuele entre cualquier punto de Guatemala a El Salvador sin aduana, sin cobros extras. “Pudiera ayudar al turismo. Reto a todos los presentes a echar a andar el (Tratado) CA-4 en la aviación”.
El CA-4 fue incorporado en 1991 al Sistema de la Integración Centroamericana (SICA). La idea es que los ciudadanos de El Salvador, Guatemala, Honduras y Nicaragua puedan viajar entre estos países solo con su Documento de Identidad Nacional (DNI/DPI), para facilitar la movilidad terrestre y aérea.
De ser realidad, las aerolíneas no harían procedimientos de check-in y seguridad similar a volar en vuelos internacionales.