Por AFP
Costa Rica sufrió en la madrugada de este martes 31 de mayo un nuevo ataque informático, esta vez contra los servidores de la Caja Costarricense de Seguro Social (CCSS), aunque las autoridades no pudieron confirmar la implicación del grupo ruso Conti, al que atribuyeron ciberataques anteriores.
En este momento se está en total coordinación y colaboración con las autoridades de gobierno como Micitt, CNE, entre otras, para mantener un trabajo articulado ante la situación informática de ataque a la CCSS.
— CCSSdeCostaRica (@CCSSdeCostaRica) May 31, 2022
El presidente ejecutivo de la Caja, Álvaro Ramos, calificó el ataque como “violento”, aunque aclaró que las bases de datos de la institución, encargada de la sanidad pública y de las pensiones, que ya había sido hackeada anteriormente, no se vieron comprometidas.
“Creemos que son unos 30, de más de 1,500 servidores que tiene la Caja, los que están infectados, pero afortunadamente tenemos la vacuna”, dijo Ramos en conferencia de prensa.
“La institución reaccionó de inmediato y procedió a apagar los sistemas críticos, incluso los no tan críticos”, agregó. Sin embargo, la CCSS informó que el ciberataque afectará la atención en su red de hospitales.
Las autoridades confirmaron que en el ataque se utilizó el programa extorsivo “ransomware”, aunque se desconoce si sus autores son el grupo ruso Conti, al que el gobierno costarricense vincula con los hackeos que ha sufrido el país desde abril.
“Tenemos que confirmar qué grupo remitió ese ‘ransomware’ a la institución”, señaló el director de Tecnologías de Información y Comunicaciones de la Caja, Roberto Blanco.
Pocos días después de asumir el poder el 8 de mayo, el presidente Rodrigo Chaves declaró que Costa Rica estaba en “guerra” con los piratas informáticos y decretó estado de emergencia nacional.
El expresidente Carlos Alvarado manifestó antes de dejar el cargo que su gobierno se negó a pagar el dinero exigido por los hackers de Conti para no publicar la información obtenida ilegalmente.