Por Agencia EFE
Uno de cada cinco trabajadores, entorno al 20 %, está expuesto a la automatización tecnológica en Perú, y el 24,1 % está expuesto a la inteligencia artificial (IA) generativa, según revela un estudio presentado por el Centro de Investigación del Instituto Nacional de Estadística e Información (INEI).
Elaborado con datos de la Encuesta Nacional de Hogares (Enaho), el informe 'Doble desafío tecnológico: análisis de la exposición a la automatización tradicional y a la inteligencia artificial generativa en el empleo peruano, 2024', hecho por el filósofo Omar Manky Bonilla, registró -mediante entrevistas- los empleos más vulnerables a los avances tecnológicos.
En el caso de las labores manuales o repetitivas, labores como limpiadores y asistentes, ayudantes de cocina, empleados de control y abastecimiento o estibadores, se presentan como los más expuestos a ser remplazados por maquinaria y robots, por la facilidad con que pueden automatizarse.
Respecto a las actividades técnicas o administrativas, empleos como técnico en administración, en contabilidad o del derecho y servicios legales, así como instructores en tecnología de la información y especialistas programadores, son los que se exponen a otro tipo de avance: la IA generativa, herramientas digitales de análisis y automatización que reducen significativamente el tiempo de realización de las tareas.
Entre las profesiones menos vulnerables a la automatización tradicional, el estudio señala a profesores de primaria y secundaria; bordadores, repartidores y ayudantes de costura; tejedores a mano; y especialistas en belleza y actividades afines.
Así mismo, otras actividades como peones agrícolas y ganaderos; agricultores y trabajadores de cultivos mixtos; peones de construcción de edificios; vendedores de kioscos y mercados; o conductores de automóviles, taxis y camionetas, se salvan de cribados tecnológicos como la IA generativa.
No obstante, pese al continuo avance tecnológico, esta no apunta a ser, afirma el estudio, una preocupación a corto plazo, dado que "más del 70 % de la población ocupada es informal, lo que reduce la inversión en tecnología".
A su vez, en Perú predominan las microempresas con bajos niveles de estandarización y digitalización y, en muchos casos, los trabajos continúan siendo manuales, lo que disminuye el impacto inmediato del reemplazo tecnológico, pero, según el estudio, también "limita la modernización del mercado laboral".