Por Leonel Ibarra - revistaeyn.com
Algunos Presidentes de países de Centroamérica reaccionaron al comienzo del segundo mandato no consecutivo del presidente de Estados Unidos, Donad Trump.
El presidente de Guatemala, Bernardo Arévalo, escribió en su cuenta de X “felicito al presidente de los Estados Unidos, Donald Trump, por el nuevo mandato que asume”.
“Guatemala y Estados Unidos tienen grandes oportunidades de colaboración que nos permitirán continuar avanzando en los grandes temas que unen a nuestras naciones”, agregó el mandatario guatemalteco.
Por su parte, Xiomara Castro, presidenta de Honduras, dijo en X que en “nombre del Pueblo y Gobierno de Honduras, felicitamos al Presidente Donald Trump por asumir la presidencia de los Estados Unidos”.
“Reiteramos nuestro compromiso de fortalecer el diálogo sobre migración, abordando enfoques conjuntos para una migración ordenada, segura y legal. Confiamos en seguir consolidando nuestra histórica asociación, promoviendo el desarrollo económico y la seguridad en beneficio de ambas naciones”, escribió Castro.
El Gobierno de El Salvador felicitó “calurosamente” a Donald Trump por asumir el cargo de 47º Presidente de los Estados Unidos de América.
“Le deseamos éxitos en su liderazgo y tomamos esta oportunidad para reafirmar los duraderos lazos de amistad que han unido a nuestras naciones”, dijo el breve mensaje.
El presidente de Panamá, José Raúl Mulino, respondió a las declaraciones hechas por el mandatario estadounidense sobre sus intensiones de “retomar” el canal de Panamá.
“En nombre de la República de Panamá y su pueblo, debo rechazar de manera integral las palabras esbozadas por el presidente Donald Trump relativas a Panamá y su Canal, en su discurso inaugural. Reitero lo expresado en mi mensaje a la Nación, el pasado 22 de diciembre: el Canal es y seguirá siendo de Panamá”, señaló en un comunicado.
Desde sus comienzos como candidatos republicano, la retórica de Trump ha sido bastante agresiva con los principales socios comerciales, incluyendo Centroamérica en distintos temas como el aumento de la migración irregular y comercio internacional.
Por ejemplo, en julio de 2024, Trump aseguró que el crimen en Venezuela y El Salvador está cayendo, no por obra de sus gobernantes, sino porque están enviando a los criminales a Estados Unidos.
Dijo que en El Salvador -donde el presidente Nayib Bukele libra una guerra contra las pandillas- y en Venezuela, la criminalidad caía “porque están enviando a sus asesinos a los Estados Unidos de América”.
A los días, retomó su discurso de, en caso de ser elegido presidente de Estados Unidos, suspenderá la asistencia económica que Estados Unidos brinda a los países del norte de Centroamérica si no detienen el flujo de migrantes irregulares.
“No les vamos a dar el dinero. No recibirás más dinero, los tres países en particular, El Salvador, Guatemala, Honduras, países difíciles y estaban enviando a todos sus criminales a nuestro país”, señaló.
Por su parte, la presidenta Castro, advirtió que si el Gobierno de Trump, hace una deportación masiva de hondureños la base militar estadounidense en territorio hondureño no tendría razón de existir.
“Frente a una actitud hostil de expulsión masiva de nuestros hermanos, tendríamos que considerar un cambio en nuestras políticas de cooperación con Estados Unidos, especialmente en el campo militar, en el que sin pagar un centavo por décadas mantienen bases militares en nuestro territorio, que en este caso perderían toda la razón de existir en Honduras”, dijo Castro.