Por Gabriela Origlia - Estrategia & Negocios
CIOM es una empresa de tecnología para el alto management que nació en Guatemala de la mano del emprendedor argentino Alejandro Guzmán de San Félix.
Opera en 20 países del Caribe, Centroamérica y Suramérica. El foco está puesto en una plataforma digital que condensa los indicadores clave y complejos de gestión, integra los datos propios de la empresa usuaria, audita sus puntos de venta, mejora la atención al cliente y monitorea a sus competidores. Trabaja con grandes compañías, pero también con Pymes que quieran optimizar su performance.
“Tenemos el propósito de ayudar a todas las organizaciones del mundo en su constante evolución, a través de tecnología de fácil uso y visualización de resultados. Queremos brindar herramientas innovadoras basadas en la recolección de datos reales para que cualquier empresa pueda mejorar, midiendo sus operaciones de la manera correcta”, sintetiza Guzmán de San Félix.
El equipo de CIOM cuenta con 30 personas que trabajan en su plataforma, de desarrollo propio (SaaS).
En diálogo con E&N, Guzmán de San Félix relata que a los 18 años su familia se mudó a Guatemala porque su padre, quien era director del Grupo Techint, fue trasladado a ese destino. Años después, sus padres regresaron a la Argentina, pero él se quedó. Encaró dos emprendimientos que fueron la antesala de CIOM.
La inversión original fue de unos US$2,5 millones para desarrollar la plataforma que permite relevar datos y cruzarlos para optimizar el desempeño de una empresa. En las rondas de capitalización participaron inversores de España, Emiratos Árabes, Panamá y Colombia. En este 2025 el objetivo es “avanzar hacia el ‘hágalo usted mismo’. La tecnología que tenemos permite hacer de manera sencilla lo que operativamente es complejo.
En cinco segundos se puede entender el estado de la compañía y en qué hay que mejorar”, explica el empresario.
La plataforma de CIOM puede realizar el relevo de datos en campo a través de un sistema basado en crowdsourcing. Si una empresa requiere un equipo de personas para hacerlo, se pueden relevar puntos de contacto con el cliente, tanto interno como externo, de manera simple y rápida.
GUATEMALA, PUNTO DE PARTIDA
Guzmán de San Félix define a Guatemala como un país “muy interesante”, que le dio “todo” para convertirse en empresario. Apenas llegó, colaboró con su padre en el área de tecnología y se inscribió en Relaciones Internacionales, en la Universidad Francisco Marroquín, carrera que dejó faltándole pocas materias porque se dedicó totalmente al trabajo.
A fines de la década de 1990, con un compañero universitario guatemalteco “muy bien vinculado”, pusieron en marcha una consultoría para empresas que salían a vender por Internet. Web Consulting Group fue el nombre de la iniciativa que asesoraba sobre los cambios a realizar en lo que eran los marketplaces de entonces.
“Yo analizaba y él tenía los contactos, era el abre puertas”, recuerda.
A comienzos de los 2000, junto a su socio fueron a un bingo del Rotary Club y a su lado había un funcionario de Exxon Mobile.
“Estaban buscando un proveedor. Estamos hablando de un gigante, de la empresa que fue la más rentable del planeta por muchos años. Buscaban monitorear a la competencia y hacer logística para verificar precios de venta. Armé una presentación al estilo universitario y nos presentamos”.
No olvida que los recibió el entonces director de Compras para Latinoamérica, quien los escuchó y los felicitó pero les planteó que eran “muy jóvenes” para contratarlos. “Nos fuimos shockeados; no sabíamos cómo seguir -admite- Ya estaba un poco aburrido de la consultoría, así que llamé a todas las petroleras hasta que Juan Orellana, de Shell, me convocó. Ahí empezó todo”.
Así nació Servicios Profesionales del Sur que sumó a todas las petroleras como clientes (incluida Exxon que se incorporó tres años después) y se expandió a El Salvador, después a Nicaragua, Costa Rica, Panamá y Honduras.
En el 2009, un cliente le pidió que ejecutara el programa de mejoras en el Caribe: “Empecé en mi luna de miel en Antigua. Y así, durante más de un año, con mi esposa Mercedes, mi socia de vida, íbamos de isla en isla”. Valora el aprendizaje que su empresa pudo realizar en las “escuelas” de Exxon y de Texaco.
“Nos enseñaron sobre otros servicios que no prestábamos, aprendimos mucho”, asegura.
Walmart fue la primera compañía no petrolera que incorporaron como cliente, lo que abrió la puerta también a otros rubros que hasta ese momento no habían atendido. Guzmán de San Félix afirma que, con toda esta experiencia, terminaron diseñando lo que a él más le apasiona, que son “los indicadores de gestión, mediciones para asegurar calidad de servicios y capacitación de equipos. Todas las compañías que los aplican mejoran, la diferencia es cuánto”.
CIOM, como tal, empezó a operar en 2018. “Con la otra empresa desarrollábamos sistemas ágiles, fáciles de aplicar, sumábamos valor, pero llegó un momento en que me faltaba pasión; de nuevo me picó el bichito de hacer algo distinto”, comenta.
“Así nació esta plataforma que permite trabajar sin necesidad de proveedor. Ese es el signo de la nueva era, cortar intermediarios. Ofrecemos auditar, capacitar, mejorar la experiencia del cliente, monitorear a la competencia. Poder hacer todo eso de una manera simple”.
ECOSISTEMA EMPRENDEDOR
Guzmán de San Félix, además de emprendedor es mentor nato. Se incorporó a Endeavor y ya está mentoreando a una startup de EE.UU. Sobre el ecosistema emprendedor de Centroamérica, describe que Panamá es un lugar en el que para iniciarse hay que contar con recursos. “La naturaleza del emprendedor es diferente en contextos de bonanza. Guatemala tiene más dinámica, se parece en eso a Colombia. También El Salvador es inquieto.
En Nicaragua se vive con un pie sobre la cabeza y en Costa Rica, como el turismo aporta mucho movimiento y dinero, no hay un nivel alto de interés emprendedor”, señala.
Finalmente, el CEO de CIOM refuerza que, “en un contexto de crisis, medir resultados se vuelve crucial. Visualizar y gestionar indicadores -argumenta- aporta tranquilidad, seguridad, y transparencia, pero por sobre todo permite a las empresas, grandes o chicas, tomar las mejores decisiones”