Por revistaeyn.com
Los más recientes datos del Instituto Nacional de Estadística y Censos (INEC) muestran una leve mejoría en el panorama laboral de Costa Rica, aunque el elevado nivel de empleo informal continúa siendo un desafío significativo.
Durante el trimestre móvil mayo, junio y julio, la población activa de Costa Rica se estimó en 2,29 millones de personas, una caída estadísticamente relevante respecto al mismo periodo del año anterior, siendo la reducción especialmente marcada entre las mujeres, con una disminución cercana a las 53.000 personas.
En paralelo, la tasa neta de participación laboral se ubicó en 53,9 %, indicativa de que poco más de la mitad de la población en edad de trabajar está involucrada en el mercado laboral, reporta el INEC.
De este grupo, aproximadamente 2,14 millones se encuentran ocupados, lo que traduce una tasa de ocupación del 50,3 %. No obstante, aún 153.000 personas permanecen sin trabajo, lo que arroja una tasa de desempleo del 6,7 %. Son cifras que denotan una leve mejora respecto a trimestres previos, aunque distan de reflejar una recuperación plena.
En materia de subempleo, el porcentaje no ha variado sustancialmente, situándose en 3,3 %, lo cual sugiere que una fracción significativa de ocupados continúa sin poder garantizar suficientes horas de trabajo.
Uno de los datos más preocupantes sigue siendo el índice de informalidad laboral, que se mantiene en 36,9 %, lo que significa que más de una de cada tres personas ocupadas está en condiciones laborales informales, sin la protección de la seguridad social o contratos formales.
Al observar sectores con mayor dinamismo, destacan comercio y reparación con 361.000 personas ocupadas, seguidos por industria manufacturera con 241 000, y el conjunto de enseñanza y salud con otros 240.000 ocupados, indica el INEC. Esto pone de relieve la fortaleza relativa del sector servicios y la manufactura como focos de empleo en Costa Rica.