Por Leonel Ibarra - revistaeyn.com
El Salvador contará con una conexión submarina directa al ecosistema global de Internet, un proyecto que busca reducir dependencias, fortalecer la soberanía tecnológica y preparar la infraestructura nacional para un futuro marcado por la inteligencia artificial, el cloud y el crecimiento acelerado del tráfico de datos.
La Superintendencia General de Electricidad y Telecomunicaciones (SIGET) adjudicó la licitación a Liberty Networks para el diseño, construcción, despliegue y operación del primer cable submarino salvadoreño.
La iniciativa contempla un sistema de aproximadamente 1.800 kilómetros de longitud, que enlazará a El Salvador con Panamá y, desde allí, con los principales nodos internacionales, incluidos los de Estados Unidos, a través de la red regional de la compañía.
Este proyecto se enmarca en el préstamo por US$145 millones para el 'Fortalecimiento de la soberanía de conectividad: cable submarino' otorgado por el Directorio de CAF -banco de desarrollo de América Latina y el Caribe en julio de 2024.
Carmine Sorrentino, Chief Commercial Officer de Liberty Networks, explicó que hasta ahora, la conectividad internacional del país ha dependido exclusivamente de enlaces terrestres que atraviesan Guatemala y Honduras para luego acceder a cables submarinos en otros territorios.
"Si bien ese esquema ha permitido mantener el servicio, también expone a la red nacional a mayores riesgos de interrupción y a limitaciones en capacidad y redundancia. El nuevo sistema submarino cambia esa lógica al ofrecer una ruta directa, más robusta y con mayor margen de crecimiento", señaló Sorrentino.
PIEZA CLAVE DE DESARROLLO
Desde Liberty Networks subrayan que el proyecto va más allá de una obra de ingeniería. Se trata, aseguran, de una pieza estratégica para el desarrollo económico y digital del país. "Un cable submarino no solo incrementa el ancho de banda disponible, sino que mejora la estabilidad del servicio y reduce la latencia hacia determinados destinos, especialmente en América Latina, al evitar recorridos innecesarios por centros lejanos antes de llegar al contenido", apunta Sorrentino.
El diseño del sistema responde a estándares de última generación en fibra óptica, con una vida útil inicial estimada en 25 años y la posibilidad de ampliaciones futuras conforme crezca la demanda. Aunque los detalles técnicos finales se darán a conocer más adelante, la empresa confirma que ya se encuentra en plena fase de ingeniería y estudios marinos, tanto en los puntos de aterrizaje en El Salvador como en Panamá. El socio tecnológico encargado de la fabricación e instalación será anunciado en las próximas semanas.
El calendario prevé que el cable entre en operación durante el segundo semestre de 2028. Para entonces, el Gobierno salvadoreño será el propietario del activo, enmarcado dentro de un programa más amplio de fortalecimiento de la conectividad nacional, que incluye financiamiento del CAF orientado a reforzar la autonomía digital del país.
Sorrentino dijo que este tipo de infraestructura es clave para sostener proyectos emergentes como centros de datos, servicios de telemedicina, educación digital e iniciativas basadas en inteligencia artificial.
Telecomunicaciones (ITW 2023), C&W Networks (Cable & Wireless Networks) y C&W Business (Cable & Wireless Business) en América Latina anunciaron en 2023 su unión bajo la marca unificada Liberty Networks, como parte de Liberty Latin America (LLA) con una inversión inicial de US$250 millones.
Liberty Networks es un proveedor de infraestructura y conectividad empresarial en América Latina y el Caribe, que conecta aproximadamente 40 países con casi 50.000 kilómetros de cable submarino de fibra óptica y 17.000 kilómetros de redes terrestres.
En octubre de 2024 anunciaron la construcción y comercialización de MANTA, el primer cable submarino internacional del Golfo de México y conectará México y Estados Unidos con Centroamérica y Latinoamérica. El sistema tendrá una longitud estimada de 5.600 km y está diseñado para soportar un mínimo de 20Tb por par de fibras, proporcionando nuevas rutas de baja latencia para interconectar los principales centros de datos de Ciudad de México, Querétaro, Bogotá y Ciudad de Panamá con Estados Unidos.
Además, en septiembre de este año dieron a conocer el lanzamiento de MAYA-1.2, un sistema mejorado que duplica la capacidad del cable submarino MAYA-1 que se extiende a lo largo de 2.386 km, con una capacidad mínima en anillo de 4 Tbps, y mantendrá tres puntos de aterrizaje vitales: Florida (Estados Unidos), Puerto Cortés (Honduras), y Half Moon Bay (Gran Caimán). Se prevé que la modernización se complete en la primera mitad de 2026.
"Nosotros comunicamos esas inversiones que se han hecho al largo de este tiempo, ¿no? Además de los cables que estamos desarrollando, nosotros también estamos teniendo una extensión de nuestra red de punto de presencia en México, en Perú. La idea de nosotros es continuar con esto también en el 2026", apuntó Sorrentino.