Por José A. Barrera - revistaeyn.com
La cadena centroamericana de restaurantes Pollo Campero abrió este martes (09.04.24) su local número 100 en el mercado estadounidense.
El nuevo establecimiento se ubica en Miami Gardens, en el sur del estado de la Florida, una región donde se ha expandido con fuerza en el último año y han abierto cuatro establecimientos solo en los últimos seis meses, entre ellos uno en Landstar Blvd, Orlando.
Campero, parte del portafolio de inversiones de la guatemalteca Corporación Multi Inversiones (CMI), consolida su operación en Estados Unidos 22 años después del inicio de su expansión por Norteamérica.
"La expansión de Pollo Campero en Estados Unidos refleja nuestro compromiso en crear oportunidades que cambian vidas y entregar sabores y experiencias excepcionales a las familias de todo el mundo”, comentó José Gregorio Baquero, CEO CMI Alimentos.
Expansión agresiva
Las nuevas aperturas en Estados Unidos forman parte de un plan de inversiones por US$190 millones anunciado en 2022 el cual les permitirá duplicar su presencia en los próximos tres años en el mercado de consumo más grande del mundo.
Campero espera abrir al menos 25 restaurantes en Estados Unidos para finales de 2024, pero proyectar llegar a los 250 locales operativos en 2027 y superar en ese plazo lo alcanzado en 22 años.
"Este es un momento emocionante para Pollo Campero. Seguimos creciendo la base de fans de la marca con quienes compartimos la pasión por nuestros sabores únicos. Estamos creciendo y ampliando nuestra presencia en Estados Unidos, un mercado altamente competitivo”, destacó Luis Javier Rodas, Managing Director de Campero USA.
La cadena ya tiene presencia en 19 estados y ha logrado conquistar a un público más amplio que el nostálgico, estrategia que a la fecha le permite a Campero USA generar unos 2.500 empleos directos.
Más allá de la nostalgia
Baquero destacó que la marca no solo sigue creciendo alentada por el consumidor nostálgico, si no por la conquista de nuevos consumidores.
"Para CMI es un orgullo increíble el poder abrir el restaurante número 100 y es el testimonio de poder triunfar en Estados Unidos, del poder expandir nuestra marca no solo para los consumidores guatemaltecos y salvadoreños, si no para el consumidor crossover y para todos los consumidores estadounidenses", destacó el CEO de CMI Alimentos.
Por su parte, Rodas dijo que la estrategia de Campero USA es integral y busca afianzarse en nuevos nichos, pero sin descuidar a su base de consumidores nostálgicos.
"Cuando llegamos en abril de 2022, llegamos persiguiendo esa nostalgia (al consumidor guatemalteco y al salvadoreño) y empezamos a abrir restaurantes, pero era inevitable que diferentes culturas y consumidores nos empezaran a probar y la sorpresa, para ellos -por que nosotros sabíamos que les iba a gustar- es que esto les encantó y cuando empezamos a ver que estaba esa oportunidad la empezamos a construir de una manera más proactiva, llegando a donde diferentes consumidores estaban para que nos probaran y regresaran", dijo.
Los primeros restaurantes se abrieron en Los Ángeles, California, y se convirtieron en récords de venta y largas filas para ingresar a los establecimientos por el interés que despertó entre las comunidades de centroamericanos que -antes de la llegada de la cadena- habían popularizado el transporte de cajas con pollo frito en los vuelos comerciales que conectaban a San Salvador y Ciudad de Guatemala, práctica que se mantiene intacta en la actualidad.
El ejecutivo añadió que el mercado nostálgico sigue siendo clave, pero que hay un horizonte mayor. "Hoy, 22 años después, nuestro cariño por los guatemaltecos y salvadoreños es gigantesco y por su puesto las comunidades donde ellos están es donde primero vamos, pero luego se dan otras aperturas como la de hoy (en Miami Gardens) que están en mercados que son más crossover y que por ende muchas otras etnias nos visitan", explicó.
El año pasado la marca también tuvo otro hito: la apertura en Manhattan, un área donde también están en expansión.
Campero: un jugador global
Pollo Campero nació en 1971 por iniciativa de Dionisio Gutiérrez G., con un primer restaurante especializado en pollo frito en Ciudad de Guatemala y pocos meses después inició su expansión en El Salvador donde es adoptado como propio.
En sus 53 años de historia la marca ha consolidado su liderazgo y sirve a más de 80 millones de clientes por año. Actualmente tiene presencia en Estados Unidos, México, Honduras y Ecuador y es un área clave de negocio de CMI Alimentos por sus más de 350 establecimientos y más de 8.000 colaboradores.
En el libro "Memorial de Cocinas y Batallas", Francisco Pérez de Antón, narró una historia de negocios marcada por la pasión de Dionisio Gutiérrez G., que no dudaba en probar recetas en la cocina y ponerse detrás del mostrador. Su hijo, Juan José Gutiérrez, dirigió por casi tres décadas la empresa en crecimiento.
"La marca definió una cultura y la forma cómo el consumidor guatemalteco comería pollo, y desde ese entonces ponemos las reglas del juego", le dijo a Estrategia & Negocios el empresario hace un par de años.
Juan José Gutiérrez, primer hijo del fundador de la cadena, estuvo desde muy joven cerca de la génesis de Campero.
En otra entrevista con Estrategia & Negocios, recordó que en la época de preapertura del primer Campero, muchas de las pruebas de sabores y productos se hicieron en la cocina de su casa y cuando el restaurante abrió, se involucró acompañando a su padre en los restaurantes.
El empresario recuerda que en sus primeros años al frente de la cadena se involucró en todos los procesos.
"Manejé restaurantes, freí pollos, estuve atrás de una caja, y eso es lo que me ha dado la fortaleza de saber hasta dónde puede llegar nuestra gente", dijo en esa oportunidad. Juan José Gutiérrez es actualmente presidente chairman de CMI Alimentos y fue parte del protocolo de corte de cinta por el restaurante número 100 de la cadena en Estados Unidos en la que también participó Juan Luis Bosch, quien funge como presidente chairman de CMI Capital, otra de las agrupaciones de negocios de CMI.