Por revistaeyn.com
En 2021, banco de desarrollo de América Latina y el Caribe (CAF) asumió el compromiso de convertirse en el banco verde y azul de la región. Como parte de esta iniciativa, en 2022, durante la Conferencia de las Naciones Unidas sobre los Océanos en Lisboa, CAF se adhirió a los Principios de Financiación de la Economía Azul Sostenible de UNEP FI, estableciendo la meta de movilizar US$1.250 millones entre 2022 y 2026.
Estos recursos se han destinado a un total de 17 operaciones de crédito y 18 cooperaciones técnicas con componentes de economía azul sostenible y protección de zonas marítimas y costeras, beneficiando a 16 países de América Latina y el Caribe.
Entre los proyectos llevados a cabo destacan la protección de áreas marinas, la pesca sostenible, la restauración de corales, la gestión del sargazo, la prevención de inundaciones y el saneamiento de residuos, entre otras.
Esto ha incluido iniciativas de adaptación costera (Trinidad y Tobago), transición energética en el sector camaronero (Ecuador), saneamiento marino (Ecuador, Brasil, El Salvador), y políticas oceánicas (Colombia) a través de créditos.
Las cooperaciones técnicas abarcan desde restauración de corales y manejo de sargazo hasta la gestión de áreas marinas protegidas y la reducción de la pesca ilegal. Además, CAF gestionó US$90 millones en Fondos Verdes para promover la economía azul y controlar especies invasoras, y aseguró US$25.7 millones adicionales para restauración de manglares y manejo de sargazo.
"Este hito en el financiamiento azul evidencia nuestro compromiso con la preservación de los ecosistemas marinos y costeros, vitales para el futuro de nuestra región. Hemos invertido en proyectos que no solo buscan la sostenibilidad ambiental, sino que también impulsan el crecimiento económico y el bienestar de nuestras comunidades", dijo Sergio Díaz-Granados, presidente ejecutivo de CAF.
Algunas de las principales áreas de acción fueron Áreas Marinas Protegidas. Se fortaleció la gestión de 1.5 millones de km2 para aumentar poblaciones de peces, mejorar la resiliencia al cambio climático, y fomentar el empleo pesquero e investigación científica.
Con US$17 millones en 3 operaciones, CAF apoyó el diagnóstico y manejo de la pesca ilegal. También fortaleció capacidades, monitoreo de pesca artesanal y cadenas de valor; US$26 millones en 3 operaciones para medidas de bioseguridad y erradicación de especies invasoras; US$275 millones en 18 operaciones para plantas de tratamiento de aguas residuales y mejora de redes; US$50 millones en drenaje pluvial y macrodrenaje para beneficiar a 140.000 personas y reducir significativamente los daños por inundaciones.