Por revistaeyn.com
El precio del cacao se ha triplicado en apenas unos meses. ¿Por qué? ¿Significa esto que se reducirá la pobreza generalizada entre los productores de cacao?
El precio del cacao se ha disparado desde principios de año y cada día alcanza nuevos niveles récord. Incluso superó la marca de US$10.000 por tonelada. Hace un año, el precio estaba por debajo de los US$3.000.
Agricultores no pueden vivir del cacao
El mercado del cacao no está funcionando en beneficio de todas las partes involucradas. Los productores de cacao, por ejemplo, no pueden vivir de su trabajo. Desde hace décadas, hay informes sobre su situación de pobreza, además de la desnutrición y trabajo infantil. Siempre se dijo que su situación mejoraría si el precio del cacao fuese más alto.
A esto se suma que sólo dos países, Costa de Marfil y Ghana, producen casi dos tercios de la cosecha mundial de cacao y, a pesar de esta posición excepcional, no pudieron imponer precios más altos.
La razón de la actual explosión de precios se debe al colapso masivo de las cosechas. "De momento se estima que la cosecha en Costa de Marfil y Ghana se ha desplomado en al menos un tercio", afirmó Friedel Hütz-Adams, experto en cacao del Instituto Südwind, en Bonn, Alemania, que estudia el comercio mundial y la política de desarrollo. "Ya que estos dos países representan 60 % de la cosecha mundial de cacao, existe un déficit significativo en el mercado", agregó.
Factores medioamientales y malas cosechas
El origen de las pésimas cosechas se debió al fenómeno climático El Niño y a factores locales, explica Hütz-Adams. En los trópicos y dependiendo de la región, El Niño provocó demasiadas, muy pocas o intervalos irregulares de lluvia, por lo que los cultivos se dañaron. En Costa de Marfil y Ghana, el fenómeno se ha visto exacerbado por la avanzada deforestación de los bosques locales, precisa Hütz-Adams.
Muchos productores de cacao son tan pobres que apenas pudieron permitirse el lujo de comprar fertilizantes y pesticidas y se hallaban muy indefensos ante la situación. "El año pasado en Ghana, al principio no llovió nada en muchas regiones y luego lo hizo durante tanto tiempo que los árboles de cacao permanecieron bajo agua durante mucho tiempo y las enfermedades se propagaron a los frutos", afirmó el experto. "Es una mezcla catastrófica", lamentó.
Muy poco dinero para los agricultores
La Unión Europea (UE) es el mayor mercado de venta de cacao, donde se consume alrededor de la mitad de la producción mundial, seguida de Estados Unidos. Aquí también se encuentran las grandes corporaciones que fabrican y venden chocolate, barras de chocolate o cacao en polvo a partir de granos y donde tiene lugar la mayor parte del valor agregado.
De cada euro que cuesta una barra de chocolate, sólo unos siete céntimos acaban en el bolsillo de los productores de cacao y unos 80 céntimos van a parar a los fabricantes y minoristas.
Para planificar mejor este negocio de miles de millones de dólares, los fabricantes de chocolate compran los granos de cacao mucho antes de su cosecha. En la bolsa de valores, las transacciones que se relacionan con entregas futuras se denominan "futuros del cacao”. Los precios récord actuales también son válidos para los "futuros”.
El precio alto permanecerá dos años más
Tanto en Costa de Marfil como en Ghana, las autoridades nacionales del cacao organizan la venta de la cosecha. Meses antes de la cosecha de octubre, ya vendieron 80 % de la producción. Y "lo trágico es que los agricultores de Ghana y Costa de Marfil no obtuvieron beneficios de la temporada actual, porque los precios ascendieron después de vendida ya la producción”.
En 2023, la mayoría de los agricultores vendió una tonelada por US$1.800 y además padecieron graves pérdidas de cosechas.
En la actualidad, los comerciantes están intentando conseguir todo el cacao posible en los pequeños países productores y, dependiendo de la calidad y las conexiones de transportes, pueden volver a ocasionar aumentos de los precios.
Los precios "futuros" en las bolsas muestran que el precio del cacao será alto en los próximos dos años, según Hütz-Adams, lo que alegra a los agricultores de los grandes países productores de cacao.
Sin embargo, queda por ver si se resolverán los problemas de pobreza, desnutrición y trabajo infantil en el sector, de los que se han quejado por más de 25 años. Y es que el actual aumento de precios se debió más a una falta de oferta que a un aumento de la demanda, por ejemplo, debido al aumento del consumo de chocolate en Asia.
Con información de DW