Conectan a agricultores salvadoreños a mercados y promover la seguridad alimentaria
Por revistaeyn.com
El Banco Mundial (BM), Japón y El Salvador colaboran en un proyecto para mejorar el acceso a mercados, la seguridad alimentaria y la diversidad nutricional en la cordillera El Bálsamo, departamento de La Libertad.
Se prevé que esta iniciativa beneficie directamente a 6.250 familias de agricultores. Será ejecutada por la organización Catholic Relief Services (CRS), de El Salvador.
“No dejar a nadie atrás, con este lema hemos venido trabajando desde hace más de dos décadas junto con el Banco Mundial en El Salvador”, dijo el Embajador de Japón en El Salvador, Yoshitaka HOSHINO. “Apoyar el desarrollo productivo y la comercialización de los productos de agricultores en comunidades rurales, aplicando nuevas técnicas que los ayuden a mitigar los efectos del cambio climático, complementará el trabajo de la cooperación japonesa en el país”.
El proyecto “Conectando las comunidades agrícolas con las economías costeras en el Bálsamo- Costa Viva”, financiado con una donación de US$2.76 millones del Fondo Japonés de Desarrollo Social (JSDF, por sus siglas en inglés), y aprobado por el BM en mayo del año en curso, conectará a los productores de granos básicos, frutas, vegetales y café de la cordillera El Bálsamo con las economías en expansión de la costa, incluyendo mercados, hoteles y restaurantes, que a la vez se beneficiarán de las mejoras en la inclusividad, sostenibilidad y calidad de los productos proveídos por los agricultores.
“Desde el Banco Mundial nos sentimos entusiasmados de ser parte de este proyecto que busca transformar la manera en que se producen y comercializan los alimentos en comunidades con muchas necesidades económicas y alta inseguridad alimentaria y nutricional en El Salvador. Es un esfuerzo notable de gran impacto que permite proteger nuestro planeta y asegurar una buena nutrición para las futuras generaciones", destacó Carine Clert, Gerente de País del Banco Mundial para El Salvador y Costa Rica.
En particular, se enlazará a 1.250 familias agrícolas de los distritos de Chiltiupán, Comasagua y Tamanique con los mercados costeros y de Santa Tecla en La Libertad, lo que mejorará el acceso a alimentos frescos y nutritivos y contribuirá a reducir la pobreza en estas comunidades rurales.
“Las personas agricultoras, incluidas mujeres y jóvenes, son clave para la restauración de paisajes, el desarrollo agrícola y la creación de alianzas que mejoren el acceso a mercados. Costa Viva busca mejorar los medios de vida con un fuerte impacto comunitario”, agregó Blain Cerney, Representante de País de Catholic Relief Services en El Salvador.
SEGURIDAD ALIMENTARIA
En materia de seguridad alimentaria, el proyecto mejorará la diversidad nutricional, salubridad e higiene en 5.000 hogares vulnerables en las comunidades de intervención, beneficiando así a unas 25,000 personas.
El proyecto, previsto para finalizar en diciembre de 2027, financiará planes de negocios para los agricultores que adopten prácticas inteligentes desde el punto de vista climático y nutricional, con el fin de impulsar la sostenibilidad ambiental y los aportes nutritivos y, además, de aumentar la productividad y los ingresos familiares.
Para lograrlo, se fomentará la creación de alianzas productivas entre agricultores y mercados locales con el apoyo de las Asociaciones de Desarrollo Comunal.