Por revistaeyn.com
Guatemala también estpá a la expectativa, como Costa Rica, por la Ley para Mantener los Centros de Llamadas en América 2025, una iniciativa que busca frenar la pérdida de empleos en los centros de atención telefónica y mejorar la calidad del servicio al cliente en Estados Unidos.
El sector de Contact Center y BPO es un importante motor económico para Guatemala. Según datos de la Asociación Guatemalteca de Exportadores (Agexport), citados por Prensa Libre, este sector genera aproximadamente 55 mil empleos formales, con salarios que pueden ser hasta el doble del salario mínimo.
Los datos compartidos anteriormente abarcan únicamente a los socios del sector de Contact Center y BPO de Agexport.
Además, dentro de estos empleos, una proporción importante corresponde a empresas estadounidenses que operan en Guatemala. Según datos de Agexport, para Estados Unidos la cifra estimada es:
La misma es promovida por el senador demócrata por Arizona, Rubén Gallego, junto con el senador Jim Justice.
Los centros de llamadas son una fuerza económica clave en Estados Unidos, ya que emplean aproximadamente a 3 millones de representantes de servicio al cliente. Sin embargo, en los últimos años, muchas empresas han trasladado estas operaciones al extranjero o han reducido su tamaño en el país, provocando un impacto negativo en el empleo local, según lo justifica los promotores.
Según proyecciones de la Oficina de Estadísticas Laborales (BLS, por sus siglas en inglés), se espera que para 2033 se pierdan cerca de 150 mil empleos en centros de llamadas en Estados Unidos. A esto se suma la creciente sustitución de trabajadores humanos por sistemas automatizados y chatbots, con el objetivo de reducir costos, aunque esto ha deteriorado la calidad del servicio al cliente.
Precisamente, la ley pretende revertir estas tendencias negativas mediante varias disposiciones clave como Preferencia en contratos federales: Las agencias gubernamentales deberán priorizar a empleadores estadounidenses que no estén en la lista, y todo trabajo relacionado con contratos federales deberá realizarse en EEUU.
Si el Congreso aprueba esta legislación, podría cambiar drásticamente el mapa de operaciones del sector BPO en América Latina.