Por revistaeyn.com
Trabajadores, empleadores y autoridades públicas de Panamá lograron alinearse para actualizar el salario mínimo nacional. El Gobierno confirmó que el nuevo ajuste, que oscilará entre US$10 y US$15 mensuales, se aplicará desde el 16 de enero de 2026.
La decisión surge de un consenso inédito dentro de la Comisión Nacional de Salario Mínimo, un espacio históricamente marcado por posiciones irreconciliables.
El Ministerio de Trabajo y Desarrollo Laboral informó que la cifra anunciada corresponde a un incremento nominal y no a un porcentaje específico, y que el pacto favorecerá a más de 400.000 asalariados en todo el país. Según detalló la institución, las discusiones abarcaron cada sector económico “con total apertura”, evaluando actividad por actividad hasta encontrar un punto de coincidencia.
La ministra de Trabajo, Jackeline Muñoz, celebró el resultado de la negociación, señalando que tanto sindicatos como gremios empresariales mostraron una disposición poco habitual para alcanzar metas comunes.
A su juicio, el acuerdo refleja una apuesta compartida por la estabilidad y la cohesión social en un momento en que el país busca fortalecer su clima laboral.
Panamá cuenta con más de 50 escalas diferentes de salario mínimo, una compleja estructura que varía de acuerdo con la región y el tipo de actividad productiva. La ley obliga a revisar estas tarifas cada dos años mediante una mesa tripartita; sin embargo, hasta ahora, las conversaciones siempre habían terminado sin una postura conjunta, dejando al Ejecutivo la responsabilidad de establecer el ajuste final.
La ronda más reciente de discusiones arrancó el 21 de noviembre y tenía como plazo máximo el 10 de diciembre. De no haberse alcanzado un punto medio —como había ocurrido tradicionalmente— el Gobierno habría intervenido para definir el aumento por decreto.
El país ya había experimentado un reajuste reciente en enero de 2024, cuando la administración anterior aplicó incrementos que oscilaron entre 4,5 % y 7 %, dependiendo del tamaño de la empresa y el sector económico. En aquella ocasión, las pequeñas compañías recibieron el ajuste más modesto, mientras que la industria bananera obtuvo el porcentaje más alto. Ese movimiento dejó el salario mínimo general en al menos US$341,12 mensuales.
Tras esa actualización, el salario promedio simple se ubicó en US$636,80. Los montos más altos correspondieron a mecánicos del sector aéreo, con ingresos mínimos superiores a los US$1.000, mientras que los más bajos quedaron en manos de pequeñas empresas vinculadas a la agricultura y la ganadería.
Con información de DW