Por Alejandra Ordóñez - Revista Estrategia & Negocios
El negocio de la panadería corre por las venas de Connie Beneitez de Paiz, ya que desde sus primeros años fue testigo de las horas de arduo trabajo que sus padres dedicaban a la panadería de su propiedad, la cual fundaron en 1954. A través de los años el negocio familiar fue creciendo, haciendo de Pan Europa, una marca de prestigio en Guatemala.
Al casarse con el empresario Juan Carlos Paiz, ambas familias unen sus conocimientos para hacer crecer la empresa, bajo el nombre de Panifica, en sociedad con una empresa estadounidense.
En 1996 deciden emprender una nueva compañía con la que revolucionarían el mercado: Panifresh, convirtiéndose en pocos años en el proveedor para importantes franquicias -como McDonald’s, Wendy’s, Burguer King y Taco Bell- y otras marcas exclusivas y clientes de Centroamérica, El Caribe, México y algunos países de Sudamérica.
Según Beneitez de Paiz, la clave de este éxito estuvo en saber cuándo dejar de ser un negocio de retail y aprovechar las oportunidades que representaba el nicho del B2B, sobre todo con la incursión en Guatemala de competencia foránea de la talla de Bimbo en los 90 y la aparición de los Tratados de Libre Comercio. “En esa época muchas panaderías quebraron. Para nosotros fue determinante la apertura a los TLC y a la globalización porque una de las industrias más impactadas por esto fue la de la panadería”, aseguró la CEO de Panifresh.
La apuesta fue la correcta y mucho ha cambiado la compañía desde aquella época. Pasó de ser una organización vertical, sin mandos medios y sin un organigrama definido, en la que toda la responsabilidad recaía únicamente sobre los esposos Paiz, a una con una cultura organizacional sólida y una operación basada en el trabajo en equipo, con procesos transversales, en la que todos los miembros tienen atribuciones claramente definidas, e incluso ,con un protocolo para aquellos miembros jóvenes de las familias Paiz y Beneitez que desean incorporarse.
“Además, contamos con un Consejo en el que participan miembros de las dos familias y un equipo gerencial muy capaz”, dijo. Esto ha permitido el crecimiento exponencial de Panifresh, con ventas anuales que hoy rondan los Q450 millones (US$57.7 millones) en Guatemala y entre US$8-10 millones en México, y con plantas de producción en Guatemala, Costa Rica, México y próximamente, Brasil.
Con 750 colaboradores, Panifresh tiene un claro enfoque en el bienestar de su gente, así como en la innovación y el desarrollo, lo que le ha permitido estar a la altura para competir en una industria por demás demandante.
“Como regla, el 15% de nuestras ventas deben ser de productos nuevos. Eso nos mantiene vivos, si te quedas solo con un producto, te vas a morir”.
DIGITALIZACIÓN
Una de las claves del éxito de Panifresh es la apertura a las nuevas tecnologías, por lo que hace ocho años nació Gemba, un App a través de la que se puede adquirir productos de panadería y pastelería de primera calidad.
“Creo que las panaderías van a cambiar aceleradamente hacia un negocio digital”, dijo la CEO.