Por revistaeyn.com
Las compañías de América Latina están reforzando su apuesta por desarrollar nuevos negocios como vía para sostener el crecimiento y mejorar sus márgenes. Así lo revela la sexta edición del informe State of New Business Building 2025 de McKinsey, que recoge la visión de ejecutivos de todo el mundo respecto a la creación de nuevas unidades empresariales.
Según el estudio, las organizaciones con mayor experiencia en construir nuevos negocios están logrando beneficios sólidos aun con menores niveles de inversión que en años previos. En la región latinoamericana, el 70 % de los líderes consultados afirmó haber incrementado la prioridad otorgada a este tipo de iniciativas, ya sea para capturar oportunidades emergentes o para liberar capital que impulse proyectos innovadores.
Ese mismo porcentaje lanzó al menos una nueva empresa durante el último año, lo que evidencia que la dinámica emprendedora corporativa está ganando tracción como estrategia competitiva.
A escala global, el 58 % de los ejecutivos con trayectoria en este ámbito posiciona la creación de nuevos negocios entre sus cinco prioridades principales. Aunque América Latina registra una menor proporción en comparación con el promedio mundial, los resultados financieros muestran una tendencia alentadora: el 67 % de estas empresas superó los US$10 millones en ingresos anuales en 2025. Esta cifra prácticamente duplica el nivel de 2023 (34 %) y, además, sobrepasa el promedio global del 61 %.
Otro hallazgo destacado es la velocidad para alcanzar la rentabilidad. En América Latina, el 76 % de las nuevas unidades empresariales llega al punto de equilibrio en un periodo de dos años, una cifra considerablemente superior al 61 % reportado a nivel mundial.
Sin embargo, este desempeño acelerado viene acompañado de una mayor exigencia de recursos: la inversión promedio necesaria es de US$113 millones, muy por encima de los US$77 millones globales. Pese a ello, la región lidera el ranking de éxito operativo, seguida por Asia, mientras que Europa y América del Norte muestran los niveles más bajos.
En el frente tecnológico, la encuesta señala que la transformación digital continúa siendo un motor clave. El 54 % de los líderes globales planea desarrollar negocios basados en datos y analítica en los próximos cinco años, y un 84 % prevé incorporar inteligencia artificial como parte del proceso de creación. América Latina, no obstante, se encuentra rezagada: solo el 39 % tiene previsto apostar por soluciones basadas en datos y apenas el 67 % contempla integrar IA, ubicándose por debajo de la media mundial.
Pese a estas brechas, la expectativa sobre el aporte futuro de los nuevos negocios es positiva. A nivel global, se estima que estas unidades corporativas generarán cerca del 19 % de los ingresos totales en los próximos cinco años, por encima del 12 % registrado históricamente.
Aunque América Latina estaría por debajo de esa media, la región prevé un crecimiento en modelos de suscripción ligados a industrias avanzadas, así como un auge de emprendimientos centrados en sostenibilidad, energía, materiales, análisis de datos e inteligencia artificial.