Por revistaeyn.com
Un renovado entusiasmo por las oportunidades empresariales en América Latina está reconfigurando el panorama regional de fusiones y adquisiciones (M&A). Así lo revela un estudio reciente de KPMG LLP, que constata un repunte notable en la confianza de los inversionistas, pese a la incertidumbre económica que domina otros rincones del mundo.
El informe, titulado “Making value pathways: A roadmap for M&A in Latin America”, muestra que las compañías están dejando atrás la cautela y apostando nuevamente por la expansión. Según el sondeo, 62 % de los altos directivos considera que las posibilidades de negocio en la región están en su punto más alto, un salto significativo de 17 puntos frente al registro de 2023.
La percepción más optimista no se queda en el discurso. Más de la mitad de los encuestados —57 %— prevé incrementar su ritmo de adquisiciones en 2026. Entre los ejecutivos identificados como de “alto desempeño”, la seguridad es todavía mayor: siete de cada diez creen que el momento actual ofrece condiciones ideales para cerrar acuerdos estratégicos, incluso si continúan existiendo particularidades regulatorias o económicas propias de cada país.
Jean-Pierre Trouillot, socio líder de asesoría de acuerdos para las Américas de KPMG LLP, destaca que esta transformación en la visión ejecutiva marca un punto de inflexión. A su juicio, el auge del optimismo no basta por sí solo. “Las cifras muestran entusiasmo, pero también una alerta: menos de la mitad de las transacciones concretadas está alcanzando el valor esperado”, señaló.
Reconfigurando estrategias
El estudio también identifica un cambio en la manera en que los líderes evalúan el riesgo. Casi dos tercios de los entrevistados —65 %— descartan la idea de que el entorno latinoamericano sea el más incierto de la última década.
La resiliencia se ha convertido en una prioridad ineludible. El 99 % de las empresas está incorporando estructuras que permiten anticipar y gestionar riesgos, una tendencia impulsada por las dificultades persistentes en la obtención de información crítica durante los procesos de debida diligencia, especialmente en los ámbitos legal, financiero y fiscal.
El apartado tributario emerge como uno de los mayores factores de transformación. Nueve de cada diez ejecutivos admite haber enfrentado sorpresas fiscales que alteraron drásticamente algún acuerdo, razón por la cual tres cuartas partes de los líderes ahora consideran indispensable contar con una estrategia fiscal robusta desde el inicio de la negociación.
La demanda de asesoría también ha evolucionado. La mayoría —57 %— ya no busca únicamente apoyo puntual, sino acompañamiento completo durante todo el ciclo de vida del acuerdo: desde la revisión previa hasta la integración posterior, instancia en la que a menudo se juega la generación real de valor.
Paradójicamente, aunque la integración cultural sigue siendo el mayor obstáculo después del cierre —identificado por 43 % de los ejecutivos— solo 28 % incorpora este factor en la debida diligencia inicial, un desajuste que sigue comprometiendo el éxito a largo plazo.