Por Leonel Ibarra - revistaeyn.com
Más adultos que nunca tienen hoy cuentas bancarias u otras cuentas financieras en los países de ingreso bajo y mediano, lo que provoca un incremento del ahorro formal, según el informe Global Findex 2025 del Grupo Banco Mundial.
Este impulso de la inclusión financiera está creando nuevas oportunidades económicas. La tecnología de los teléfonos móviles desempeñó un papel clave en este crecimiento: el 10 % de los adultos de las economías en desarrollo utilizó una cuenta de dinero móvil para ahorrar, esto es, un incremento de 5 puntos porcentuales en comparación con 2021.
En 2024, el 40 % de los adultos de las economías en desarrollo ahorró en una cuenta financiera, lo que representa un crecimiento de 16 puntos porcentuales desde 2021 y el amento más rápido en más de una década.
Para el caso particular de América Latina y el Caribe, alrededor del 70 % de los adultos tiene una cuenta, y más de la mitad la utiliza digitalmente a través de una tarjeta o un teléfono.

En cuanto a los datos de los países de Centroamérica, el informe detalla que en Costa Rica un 71 % de las personas adultas poseen una cuenta bancaria, siendo el mayor porcentaje de la región, un 60 % ha hecho o recibido pagos por medio de canales digitales y 35 % hace ahorros formales en una entidad financiera.
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Le sigue Panamá el 64 % de los adultos tiene cuenta de ahorro, un 52 % ha hecho pagos digitales y 33 % ahorra formalmente, según datos del Banco Mundial.
El Salvador está en tercer lugar pues reportaba en 2024 un 43 % de población adulta con una cuenta bancaria, 28 % ha recibido o hecho pagos mediante canales digitales y 14 % hace ahorros.
Muy de cerca está Honduras con 42 % de adultos con cuenta bancaria, 30 % de uso de canales de pagos digitales y 18 % que hace ahorros en una cuenta.
Guatemala tiene un 38 % de bancarización de personas adultas, según el informe Global Findex, un 23 % utiliza los canales digitales para realizar pagos y solamente 11 % tiene ahorros formales.
Por último, en 2024, Nicaragua presentaba un 23 % de la población adulta bancarizada, un 16 % ha utilizado medios digitales para realizar pagos y 9 % tiene ahorros formales.
IMPULSO FINANCIERO
Los mayores ahorros personales —a través de bancos u otras instituciones formales— impulsan los sistemas financieros nacionales y permiten disponer de más fondos para la inversión, la innovación y el crecimiento económico.
“La inclusión financiera tiene el potencial de mejorar vidas y transformar economías enteras”, dijo el presidente del Grupo Banco Mundial, Ajay Banga. “Las finanzas digitales pueden convertir este potencial en realidad, pero se necesitan varios elementos. En el Grupo Banco Mundial, estamos trabajando en todos ellos. Estamos ayudando a los países a que den acceso a la población a documentos de identidad digitales nuevos o mejorados”.
Según el informe casi el 80 % de los adultos de todo el mundo tiene ahora una cuenta financiera, en comparación con el 50 % en 2011. Sin embargo, aún hay 1.300 millones de adultos que no tienen acceso a servicios financieros. Los teléfonos móviles podrían ayudar a cerrar esta brecha: alrededor de 900 millones de personas adultas sin cuentas financieras tienen un teléfono móvil, incluidos 530 millones que poseen teléfonos inteligentes.
"La inversión en sistemas que faciliten las transferencias monetarias instantáneas podría ayudar a ampliar el uso de los servicios financieros. Además, podrían reforzarse los esfuerzos y marcos de protección de los consumidores para que los teléfonos y las cuentas sean más seguros", dice el reporte del Banco Mundial.
Los datos de Global Findex también indican que los servicios financieros digitales están ayudando a reducir la brecha de género en la titularidad de cuentas: a nivel mundial, el 77 % de las mujeres tienen cuentas en comparación con el 81 % de los hombres. En los países de ingreso bajo y mediano, la titularidad de cuentas entre las mujeres casi se duplicó, del 37 % en 2011 al 73 % en 2024.
Por primera vez, el informe incluye datos sobre la propiedad personal de un teléfono móvil y el uso de internet. En el mundo, el 86 % de los adultos posee un teléfono móvil, incluido el 68 % de los adultos dueños de un teléfono inteligente, según el Digital Connectivity Tracker (Rastreador de la conectividad digital 2025) de Global Findex.
Sin embargo, el mayor uso de los teléfonos móviles para realizar transacciones digitales conlleva nuevos riesgos. En las economías de ingreso bajo y mediano, de los 4.000 millones de adultos que poseen un teléfono móvil, solo alrededor de la mitad utiliza una contraseña para proteger su dispositivo.